La intención de la ILP es que el Congreso los declarare Bien de Interés Cultural (BIC), según ha explicado este viernes en rueda de prensa la Federación de Entidades Taurinas de Catalunya.

   El presidente de la entidad, Luís María Gibert, ha precisado que de las 605.000 firmas presentadas, obtenidas gracias al trabajo de más de 4.700 fedatarios en toda España, tan solo han sido rechazadas 18.300 y casi 87.000 no han sido validadas porque ya se había alcanzado el mínimo exigible.

    Gibert ha señalado en rueda de prensa que confía en que el proceso parlamentario esté resuelto antes de las vacaciones estivales, con el "sueño" de que en septiembre de este año vuelvan las corridas de toros a la Monumental de Barcelona, después de la entrada en vigor en 2012 de la prohibición para el conjunto de Catalunya que aprobó el Parlament tras otra ILP de signo contrario.

   "Para cualquier ciudadano amante de la libertad, volver a pisar la arena de la Monumental sería realmente muy bonito", ha señalado Gibert, que ha asegurado que, si eso se produjera, el último coso taurino catalán estaría lleno.

   Una vez admitidas las firmas, corresponde a la Mesa del Congreso admitir a trámite la ILP, un proceso que la Federación confía en que acabará satisfactoriamente gracias a los votos favorables de PP y PSOE, que sumarían más de 300 diputados.

   Gisbert ha insistido en que la intención de la iniciativa ha sido "corregir las injusticias" que emanan de la prohibición catalana y lograr el blindaje de las corridas taurinas, facilitando así la preservación de los valores de la cultura taurina.

 FIRMAS EN CATALUNYA

   De las más de 600.000 firmas presentadas, unas 151.000 han sido recabadas en Catalunya gracias al trabajo de 750 fedatarios, lo que la Federación considera que es un "dato importante a tener en cuenta por la Generalitat y el Parlament", cerca de dos años después de que los animalistas lograran unas 178.000 firmas para impulsar la prohibición en el Parlament -eran necesarias 50.000-.  

  El presidente de la Federación ha reconocido que, a lo largo del proceso, las dificultades fueron numerosas, y ha precisado que en agosto del año pasado tan solo eran 600 los fedatarios de toda España y la campaña de recogida "no iba demasiado bien", una situación que se revirtió y desembocó en que, a lo largo de marzo, llegaran miles de firmas cada día a la sede de la entidad, ha asegurado.

   Gisbert se ha felicitado porque la mayoría de firmas no han sido recogidas en ninguna plaza de toros y, en multitud de casos, con el apoyo de gente que ni siquiera va a los toros, ha dicho, amparados en el proceso por los "máximos estrictos criterios de legalidad" que exige la ILP.

   De este modo, ha dado por invalidada la denuncia dada a conocer esta semana por los animalistas, quienes aseguraban que a lo largo del proceso la Federación había alentado a la recogida de firmas por parte de personas que no eran fedatarias de la ILP, algo que la legislación considera ilegal.

   La Federación ha expresado que no es de su competencia valorar si la aprobación de la ILP en las Cortes españolas supondría el fin de la prohibición en Catalunya, aunque ha sopesado que el proceso podría desembocar "automáticamente" en la anulación de cualquier ley autonómica anterior contradictoria, una situación en la que también se encuentra Canarias.

   Gisbert ha animado también "con todo respeto" al Tribunal Constitucional (TC) para que dirima lo antes posible el recurso presentado en su día contra la prohibición catalana, a la vez que ha felicitado a todos los implicados en el proceso y ha subrayado que la campaña se ha llevado a cabo sin ningún apoyo político y sin ayuda financiera externa.