Aunque los organizadores, Òmnium Cultural y la Assemblea Nacional Catalana (ANC), aseguraban que se trataba era de reivindicar una consulta de autodeterminación para 2014, los más de 450 artistas que han pasado por el escenario y el público lo ha convertido en un acto marcadamente independentista.

   Uno de los momentos álgidos del concierto ha llegado cuando los asistentes han desplegado un mosaico con el lema Freedom Catalonia 2014, mientras el Orfeó Català y la Cobla de Cambra de Catalunya han interpretado el himno de Catalunya, Els Segadors.

   Las pancartas Adéu España, Catalonia Europes Next State y Catalonia is not Spain -también se ha podido ver un Euskal Presoak reclamando el acercamiento de presos etarras- se han combinado con constantes cánticos de Independència, independència, y un Bote, bote, bote, español el que no bote que se ha cantado una vez y no se ha vuelto a repetir.

   La presidenta de Òmnium, Muriel Casals, ha sido la encargada de leer el manifiesto del concierto, que advierte de que "nadie puede prohibir un referéndum democrático" y reclama a los partidos que calendaricen el proceso hacia la consulta porque no se puede aplazar.

RECORTES

   Algunos artistas, como Lídia Pujol y Gerard Quintana, también han aprovechado para cargar contra los recortes en sanidad, educación y medios públicos, y el cantante de Sopa de Cabra ha avisado: "La libertad que queremos es la que no deja a nadie por el camino".

   El concierto también ha servido para homenajear a históricos catalanistas fallecidos: el anarquista Salvador Puig Antich; el independentista valenciano asesinado por la extrema derecha Guillem Agulló; el político y filósofo Lluís Maria Xirinacs; el expresidente del Parlament Heribert Barrera (ERC); el cirujano Moisès Broggi y el fundador de Plataforma per la Llengua, Martí Gasull.

EL REGRESO DE LLACH

   Más allá de su contenido político, el concierto ha estado marcado por el regreso del cantante Lluís Llach al escenario tras seis años de retiro, para cantar Venim del nord, venim del sud, una canción que ha levantado de sus asientos a los 90.000 asistentes.

   El cantante de Verges ha subido dos veces más al escenario: una para tocar Un núvol blanc -que ha dedicado a las generaciones que han luchado antes por la independencia- y otra para cerrar el concierto junto al resto de artistas que han participado en él y entonar conjuntamente Tossudament alçats.

   Unos 40 artistas han participado en la segunda parte del Concert per la Llibertat versionando -acompañados por la Orquestra Simfònica de Barcelona i Nacional de Catalunya (OBC)- algunas de las canciones más representativas de Llach, como Que tinguem sort; Viatge a Itaca; Campanades a morts, I si canto trist y Lestaca.

   Antes, los protagonistas de la primera parte del concierto han sido grupos como Sopa de Cabra, Brams, Sabor de Gràcia y artistas como Peret, Dyango, Cesk Freixas, Pau Alabajos y Paco Ibáñez, que ha causado el silencio respetuoso del Camp Nou tocando el Como tú del poeta León Felipe acompañado de su guitarra.

   El silencio se ha tornado en palmas liderado por Peret, que, tras versionar Lemigrant, ha modificado la letra de Ella tiene poder para cambiar el Barcelona es poderosa, Barcelona tiene poder por Catalunya es poderosa, Catalunya tiene poder.

   En la primera parte de concierto a ratos escasa de ritmo por lo espaciado entre una actuación y otra, la jarana ha llegado de la mano de la Companyia Elèctrica Dharma, que, tras interpretar junto a la cantante mallorquina Maria del Mar Bonet la canción contra la represión franquista Què volen aquesta gent que ella hizo tan popular, ha agitado al público con su celebre versión de La presó del rei de França.

   Aparte de una nutrida representación de artistas catalanes, el Concert per la Llibertat ha contado con músicos y cantantes llegados de la Comunidad Valenciana, Baleares, Vascongadas, Galicia, Alemania, Italia, Alguer (Cerdeña) y Grecia, entre otros puntos.

UN DIRIGENTE DEL PSC

   CiU, ERC, ICV-EUiA y la CUP -todos los partidos que defienden la consulta menos el PSC- han enviado una delegación al concierto, en el que finalmente sí ha acudido un dirigente socialista, el miembro de la Ejecutiva Fabián Mohedano.

   La única referencia a España la hecho el cantante Ramoncín, que ha reclamado la consulta para Catalunya y ha pedido una "España republicana".

   Los organizadores se habían propuesto que el concierto también sirviera a modo de campaña de recogida de alimentos, y finalmente se han logrado 25 toneladas, que gestionará el Banco de Alimentos.