"No tengamos miedo en este proceso, se han levantado voces, sí, ¿y qué? Que se levanten, las voces no hunden a nadie porque a Jesucristo nadie lo hunde, siempre vence y nosotros con él", ha asegurado Omella, este sábado, durante la presentación del documento de la Iglesia española para la fase continental del Sínodo de los Obispos sobre la sinodalidad, convocado por el Papa Francisco.

El presidente de los obispos españoles ha destacado que este proceso sinodal es "un momento histórico para la Iglesia universal" y utilizando el símil de la tienda en el desierto que, a veces, es frágil frente a la lluvia o los ríos, el cardenal ha insistido en que también en el itinerario sinodal se encuentran "dificultades, mares y ríos que quieren anegar ese camino emprendido".

Ante esta situación, Omella ha recurrido a una historia del sacerdote francés Henri Caffarel, fundador de los Equipos de Nuestra Señora, en la que habla de un rebaño compuesto por ovejas y lobos, para animar a "no tener miedo" ante las "muchas" resistencias que se han encontrado y que se están mostrando.

También ha pedido "no tener miedo" ante la "división" que se siente en el pueblo y en la Iglesia "desde arriba hacia abajo" y ha apelado a la "comunión". "O vamos con Pedro o, si no, ¿qué hacemos? O vamos todos unidos o, si no, ¿qué hacemos?", se ha preguntado el arzobispo.

En este contexto, el cardenal Omella ha constatado que la Iglesia "ha interiorizado" y tiene que "interiorizar más el compromiso social y político, y la presencia pública" pero ha advertido de que "quizá" ha "descuidado la oración". En este sentido, ha subrayado la importancia del "Espíritu Santo" que ha definido como "pegamento del fuerte".

Así se ha pronunciado Omella durante el encuentro preparatorio para la Asamblea Continental del Sínodo de los Obispos. En el acto, que se ha celebrado este sábado 28 de enero en la sede de la CEE, tres laicos han presentado un documento elaborado por el equipo sinodal español, que responde al Documento de trabajo para la etapa continental (DEC) 'Ensancha el espacio de tu tienda', enviado por Roma, y que recoge las propuestas de la Iglesia española, que llevarán a la asamblea continental, que se celebrará la segunda semana de febrero en Praga.

En este documento, la Iglesia española propone, entre otras prioridades, reconocer "definitivamente" el papel de la mujer en la Iglesia, "en condiciones de igualdad" y "a todos los niveles eclesiales", aunque no menciona específicamente el sacerdocio femenino, que sí se nombraba en la síntesis final de junio, enviada a Roma, junto con el celibato opcional y la ordenación de curas casados.

Asimismo, la Iglesia española apuesta en el nuevo texto por "potenciar la acogida, particularmente a cuantos se sienten excluidos por su procedencia, situación afectiva, orientación sexual u otros motivos" y que las comunidades eclesiales sean "espacios integradores".

SEMBRAR ODIO EN NOMBRE DE DIOS ES UN ESCÁNDALO

En el encuentro, también ha intervenido, a través de un vídeo, el subsecretario de la Secretaría General del Sínodo, Luis Marín, quien ha reivindicado el sentido de la "fraternidad" y ha mostrado su rechazo al "insulto, la agresividad, el desprecio" que "atentan contra la comunión".

"Sembrar odio en nombre de Dios es un escándalo y produce inmensa tristeza, la revolución pendiente en la Iglesia es la del amor", ha subrayado Marín.

Asimismo, ha hecho hincapié en la importancia de la "pluralidad" y ha llamado a "integrar la riqueza de la variedad de vocaciones, culturas, personalidades y sensibilidades". "Hay tantos caminos para seguir a Cristo como personas en el mundo", ha subrayado.

En la misma línea, el coordinador del equipo sinodal de la CEE y arzobispo emérito de Zaragoza, Vicente Jiménez, ha destacado que "el sínodo avanza, no se detiene" y es un camino que hay que recorrer "en medio de luces y sombras", afrontando las "dificultades, superando rechazos y escepticismos de algunos".

El obispo ha puntualizado que la síntesis final que se presentó el pasado mes de junio fue enviada al Vaticano y "favorablemente acogida y valorada". Ahora, han redactado un documento para la fase continental del Sínodo. En concreto, la Iglesia española participará en la asamblea europea que tendrá lugar del 5 al 12 de febrero y en la que intervendrán los presidentes de las 39 conferencias episcopales europeas.

Respecto a Europa, y tras mostrar el dolor de los obispos por la "guerra cruel en la martirizada Ucrania", Vicente Jiménez ha indicado que la etapa continental del Sínodo es una oportunidad para afirmar que "Europa es cristiana aunque no sepa que lo es" y que a pesar de la "secularización, todavía hay tizones encendidos de fe". "Cristo es la esperanza de Europa y del mundo entero", ha defendido el obispo