La selección española de balonmano se ha impuesto (24-22) en un intenso y competido partido a la hasta ahora invicta Croacia, en la primera jornada de la segunda fase del Grupo II, una victoria que le permite liderar la tabla y abrirse de par el par las puertas de las semifinales del Europeo de Serbia.  

  El encuentro estuvo marcado por el poderío defensivo de ambos equipos, un aspecto en el que los de Valero Rivera acabaron siendo superiores. España dejó en la segunda mitad en sólo ocho goles a los pupilos de  Slavko Goluza y, a pesar de costarle mucho ponerse por delante en el marcador, mostró una solidez y madurez para llevarse el encuentro y demostrar que están en disposición de luchar por las cotas más altas en este Europeo de Serbia.

   La selección española saltó muy enchufada al encuentro, dispuesta a prácticamente certificar su billete para semifinales tras el resto de resultados del encuentro. En los primeros minutos ahogó el ataque de los croatas, a los que tuvo cinco minutos sin anotar. España se puso con un esperanzador 3-0, pero rápidamente los de Goluza se centraron para darle la vuelta al marcador.

   Del 4-1 se pasó al 4-8 con un brutal parcial croata de 0-7 apoyado en una intensa defensa que permitía recuperar muchos balones para salir rápidamente al ataque. Las transiciones ofensivas tras robo se sucedían ante la falta de fluidez en la circulación de las de Valero Rivera. Víctor Tomás rompió el parcial en el minuto 12, poniendo fin a la sangría

El encuentro se igualó gracias a los reajustes defensivos españoles, pero los pupilos de Rivera no eran capaces de lograr la fluidez ofensiva necesaria para definir la remontada. La precipitación hacía mella en el ataque español, mientras Lackovic y Kopljar se bastaban para mantener a los suyos ante la escasa aportación de un desaparecido Balic.

   García Parrondo pudo lograr la igualada en el marcador en el 25, pero Losert detuvo su tiro, y en la jugada siguiente Croacia volvió a abrir brecha de dos tantos. En los últimos minutos de la primera parte se sucedieron los errores de ambos equipos, incapaces de encontrar las redes rivales. A un espeso ataque de los de Rivera les ucedió un gol de Cupic desde los siete metros que situó un peligroso 11-14 en el marcador con el que se fueron al descanso.

 ESPAÑA IMPONE SU DEFENSA PERO LE CUESTA REMONTAR   

 El inicio de la segunda mitad no fue muy esperanzador para España, que fallaba numerosos ataques ante un inspiradísimo Alilovic, pero cuando peor sensaciones transmitía el equipo apareció el extremo azulgrana Víctor Tomás para empatar el partido a 16 con tres goles.   

 El empate dio aire fresco a España en defensa, pero a pesar de la igualdad en la que entró el encuentro los de Rivera no lograban ponerse por delante. Con 17-18 en el marcador los árbitros excluyeron a Gojun, pero, por segunda vez, la selección no aprovechó la superioridad numérica. Iker Romero erró un tiro desde siete metros con empate a 18 cerca del minuto 45 que hubiera dado ventaja a España.   

 La primera línea española, inofensiva durante todo el encuentro, no creaba peligro a la poderosa e intensa defensa planteada hoy por Goluza. España igualaba la fuerza defensiva croata, y eso supuso una doble exclusión para Alberto Entrerríos y Maqueda que tuvo cuatro minutos a España con inferioridad numérica salvada con un esperanzador 2-3.  

  El encuentro entraba en los últimos cinco minutos con la sensación de que España había impuesto su poderío ofensivo para ahogar la ofensiva croata, pero una jugada tras otra erraba ante la posibilidad de ponerse por fin por delante en el marcador. A falta de algo más de tres minutos, el deseo se hizo realidad gracias a un tanto de Ugalde en una jugada que, además, supuso la exclusión de Marko Kopljar

Balic se echó al equipo a la espalda y provocó un golpe de siete metros, anotado por Cupic, que además supuso la exclusión de Gurbindo. Maqueda, medio trastabillado, puso el 23-22 en cinco contra cinco, y en ese momento Alemania dobló la rodilla.   

 Cañellas logró el definitivo gol que cerró el marcador en 24-22, un resultado que deja a España líder del Grupo II con cinco puntos, uno más que Croacia y dos más que Hungría. Si España vence en su próximo encuentro a Islandia se asegurará su presencia en las semifinales del Europeo.