Con novedad de horario (la UEFA permite jugar los viernes en lugar de los sábados y los martes en lugar de los miércoles), la campeona del mundo inicia la defensa de su otra corona, la continental lograda en 2008, ante uno de los combinados modestos del panorama europeo ante el que debería sumar sus tres primeros puntos.  

  El choque del Rheinpark de Vaduz será además el aperitivo del que España jugará cuatro días después, en Buenos Aires, ante Argentina, de tinte amistoso, pero ante una selección histórica y de las poderosas que querrá derrotar al mejor equipo del momento y vengarse del 2-1 del pasado mes de noviembre en el Vicente Calderón.  

  Tras proclamarse reina mundial el 11 de julio y salvar un empate a última hora en el discutido amistoso ante México (1-1) de agosto, la campeona de Europa retorna a la actividad oficial casi dos meses después de hacer historia en el Soccer City de Johannesburgo, en lo que es el comienzo del camino hacia la Eurocopa de dentro de dos años, que en principio se presenta sin demasiadas complicaciones.  

  España es muy superior a su rival de mañana y sólo un exceso de relajación, unido a un excelso día de los locales, podría suponer un resultado sorprendente. El combinado nacional nunca ha perdido ni ha encajado un gol en sus anteriores cuatro enfrentamientos con Liechtenstein, aunque en Vaduz sus dos victorias fueron por escasos 0-2.  

  Por ello, los hombres de Vicente del Bosque tratarán de abrir cuanto antes el marcador, para posteriormente manejar el partido amparado en su superioridad técnica ante un equipo con tinte más amateur y que se intentará crecer dada su condición de local y que la visita la campeona del mundo.

VUELVE INIESTA Y MARCHENA POR PUYOL.

   El seleccionador salmantino apenas ha introducido cambios en su convocatoria y sigue confiando en el mismo bloque de los últimos años, aunque habrá que ver cómo recompone la defensa tras la baja de Carles Puyol, fijo en el centro de la zaga junto a Gerard Piqué, y sustituto natural, Raúl Albiol, está lesionado. Lo más probable para no hacer demasiados cambios será poner a Carlos Marchena y dejar a Sergio Ramos en el lateral, aunque el sevillano podría ocupar el puesto del azulgrana, permitiendo la entrada de Arbeloa.  

  Donde no habrá cambios será en el centro del campo, donde volverán a jugar los mundialistas, una vez que el héroe de Johannesburgo, Andrés Iniesta, ha vuelto a la lista y parece que el golpe sufrido en un tobillo en el último entrenamiento en Las Rozas no le impedirá estar.   

Arriba, David Villa, que ha hecho cuatro de los últimos seis tantos marcados a Liechtenstein, y habrá que ver si Del Bosque, dado el estado físico de Fernando Torres, mete al fuenlabreño, juega con otro delantero nato (Fernando Llorente) y escora al Guaj, o elige a un bajito (Cesc, Silva, Pedro o Navas).

   Por su parte, los de Hans Peter Zaugg buscarán salir lo más airosos posible de este enfrentamiento y no encajar un tempranero tanto que la obligue a abrirse. Los locales, que en agosto arrancaron un empate ante Islandia en un amistoso, sumaron su última victoria oficial ante este mismo combinado en octubre de 2007 por un claro 3-0 en la fase de clasificación para al Eurocopa de 2008. De sus 116 encuentros, sólo ha ganado seis, perdiendo 97 y empatando 13, con 48 goles a favor y 359 en contra.

   Sus internacionales siguen en equipos de segundo nivel o amateur, y su columna vertebral sigue siendo la formada por el portero Peter Jehle, los hermanos Stocklasa o la estrella Mario Frick, máximo goleador del equipo con 14 tantos y uno de los pocos que juega en Primera División. Lo hace en el St.Gallen de la Liga suiza donde también está Sandro Wieser (Basilea).