El expresidente del Gobierno Felipe González ha arremetido este miércoles contra las políticas económicas que está ejecutando la Unión Europea en estos momentos y ha considerado que para salir de la crisis no hacen faltan "más sacrificios" de los que ya están soportando los ciudadanos sino "que en Francia haya un presidente que le diga a (Angela) Merkel que no".  

  Así lo ha dicho durante un acto homenaje que Radio Sevilla de la Cadena Ser le ha organizado para conmemorar que mañana, 20 de abril, se cumplen 20 años de la Exposición Universal de 1992 (Expo 92) y en la que, según la cadena, González jugó un papel "decisivo" como presidente del Gobierno de España.  

  De este modo, González ha mostrado su "malestar" e "irritación" con la "utilización electoral" que el candidato a la reelección en la Presidencia de Francia, Nicolas Sarkozy, está haciendo de España, así como con que Merkel pretenda una "Europa alemanizada".  

  En esta línea, el expresidente ha asegurado que "el 80 por ciento de que España salga de la crisis es que, junto con los europeos, seamos capaces seamos de encontrar el camino" para ello, algo que no conseguimos porque, a su juicio, "las instituciones centrales de Europa no funcionan". Es decir, "porque el Consejo de Europa no es un Consejo de 27 miembros, sino el de una jefa y 26 subordinados y así no funciona esto".

   "La Unión Europea ha perdido en la práctica su obligación de plantear iniciativas y solo ejecuta las decisiones del Consejo de Europa, que son malas no porque cada jefe de Estado no tenga derecho u obligación de defender los intereses del país al que representa, sino porque la canciller alemana no comprende que una Europa alemana siempre fue un desastre para Europa y para Alemania", ha argumentado.

LAS REFORMAS DEL PP, "A GOLPE DE NORMAS"   

 González también se ha referido en este acto a los "recortes que no son recortes" según el Ejecutivo de la Nación y que Mariano Rajoy está llevando a cabo en España. Así, ha criticado que los estén haciendo "a golpe de normas" en lugar de buscando otras soluciones de "punto medio" con el "consenso" de todas las fuerzas políticas.   

 Así, ha dicho que, aunque "España necesita, como toda Europa, una política de austeridad, la imposición de ese tipo de austeridad que se está haciendo solo mata la economía y es un error dramático". Ha insistido, por tanto, en que el país necesita, "sin duda, ajustes estructurales pero mejor siempre con consenso que con mayorías que, aun siendo absolutas, siempre son frágiles en momentos de crisis".  

  Es por ello por lo que ha recomendado a Rajoy, desde su "experiencia y preocupación", que no destruya "lo que se ha hecho porque lo reconstruir lo que se destruye en algunas materias resulta prácticamente imposible de volver a poner en pie" y que no intente "llegar a un déficit del tres por ciento por imperativo categórico" y a "costa de los sacrificios" de los ciudadanos.   

 "No podemos seguir perdiendo el tiempo", ha aseverado tras apuntar que "esta senda por la que vamos no será la salida a la crisis" porque lo que "España necesita es una reforma estructural y hacer una política europea sí o sí".