En cuanto a la propuesta de planteada por Iñigo Urkullu de una "habilitación parlamentaria" para que Rajoy busque el final de la violencia, el titular de Interior no la rechaza si sirve para impedir los objetivos de ETA. Lo que dejó meridianamente claro es que el Gobierno no va a negociar con una organización terrorista.

  "Yo no hablé de un conflicto político" o de un "proceso político", precisó Jorge Fernández Díaz, en relación con su intervención en el Congreso de los Diputados. En este sentido, recalcó que "desde el 20 de octubre y fruto de la derrota policial a la que le ha sometido el Estado de Derecho" ETA "ha dejado de ser un problema fundamentalmente policial, que sigue siéndolo policial y por eso la Guardia Civil y la Policía siguen actuando, para tener una dimensión política".

   Pero quiso dejar claro que esa dimensión política se debe a que ese mundo trata de "convertir lo que ha sido una derrota policial en una victoria política". "Dicho de otra manera, que lo que no han conseguido asesinando durante 50 años lo vayan a conseguir ahora, evidentemente, por dejar de asesinar al haber sido derrotados policialmente", argumentó.

 ACTUAR CON DISCRECION, INTELIGENCIA Y UNIDAD

   El ministro recalcó que eso es lo que dijo ayer y dice hoy y añadió que "quien quiera interpretarlo de otra manera es su problema". Y añadió: "Cómo voy a dar una dimensión política a ETA por el amor de Dios".  

  Insistió en que los demócratas no pueden consentir que "una derrota policial de ETA" se convierta en una "victoria política" ahora por dejar de asesinar.

  "Esa es la dimensión política del momento en el cual nos encontramos". Por ello, considera que los demócratas deben ser "lo suficientemente inteligentes, discretos y estar unidos" con el fin de "impedir" que el mundo de ETA consiga los "objetivos políticos que no han conseguido durante 50 años asesinando, ahora que han sido derrotados policialmente".  

  Al ser preguntado por la propuesta del presidente del PNV, Iñigo Urkullu, de que haya una "habilitación parlamentaria" para dar amparo a Mariano Rajoy para que busque el final de la violencia, el titular de Interior dice que será "bienvenida" si sirve para impedir que ETA intente transformar la derrota policial en victoria política.  

  En cualquier caso, dejó claro que si Urkullu transmitió su propuesta al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy "dirá lo que tenga que decir y el ministro del Interior estará a lo que le diga, como es obvio, el presidente del Gobierno".  

 "Si esa habilitación sirviera a ese objetivo de garantizar la unión de los partidos políticos democráticos, en orden a impedir que se consiga o que se intente transformar una derrota policial en una victoria política, pues en ese sentido, esa habilitación bienvenida sea", aseveró.

 EL GOBIERNO NO VA A NEGOCIAR EN NINGUN MOMENTO CON ETA

  "Repito, todo lo que sea garantizar la unidad de los demócratas" para aislar a los que "han estado jaleando, apoyando y siguen sin condenar a los terroristas" será "buen y bienvenido, bajo la fórmula que se determine por los partidos políticos".

    Lo que dejó claro es que "el Gobierno, en ningún momento va a negociar con una organización terrorista". "ETA ha sido derrotada policialmente, otra cosa es que no se ha disuelto y el Gobierno exige su disolución, y mientras ETA no se haya disuelto, evidentemente el Gobierno, la Policía y el Estado de Derecho van a seguir persiguiendo a ETA para que no sólo deje de actuar sino que deje de existir y se disuelva definitivamente", apostilló.

   Fernández Díaz dijo estar de acuerdo con lo que está haciendo el PP del País Vasco y Antonio Basagoiti, que, añadió, "tiene la dimensión" vasca. "Yo soy el ministro del Interior, tengo la responsabilidad de gestionar el Ministerio del Interior y dirigir la lucha antiterrorista", apuntó y añadió que ambos coinciden "en el objetivo desde responsabilidades distintas".