Las autoridades húngaras han endurecido los controles en la frontera serbia para canalizar la llegada de inmigrantes y solicitantes de asilo a través de puntos autorizados. Procesará penalmente a quienes intenten entrar de forma ilegal saltando o atravesando la valla.

   El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) ya ha advertido de que, ante las nuevas dificultades, los refugiados podría buscar nuevas vías de acceso. El Gobierno de Viktor Orban sugirió el posible levantamiento de una valla en la frontera con Croacia y este martes ha apuntado también hacia Rumanía.

   "Hemos tomado la decisión de comenzar trabajos de preparación para la construcción de una valla" junto a Rumanía, a lo largo de una distancia "razonable", ha informado el ministro de Exteriores, Peter Szijjarto, en rueda de prensa.

Serbia cree que al final Hungría "tendrá que

abrir la puerta"

   Serbia está hablando con el Gobierno húngaro sobre la acumulación de inmigrantes y refugiados en su frontera, ha explicado este martes un ministro serbio, que ha considerado que Budapest "tendrá que abrir la frontera".

   Aleksandar Vulin, el ministro serbio encargado de gestionar la crisis de refugiados, no ha entrado en detalles. "Estamos hablando con los húngaros", ha declarado a Reuters en la frontera, donde cientos de inmigrantes y refugiados se están acumulando después de que Hungría haya cerrado su frontera sur. "Tendrán que abrir la frontera", ha añadido.

   Este lunes el ministro de Trabajo había dejado claro que los que cruzaran a Hungría y se registraran en este país y posteriormente sean devueltos a Serbia no serán aceptados, según ha informado la agencia serbia Tanjug.

   "No mantendremos a nadie en nuestro territorio por la fuerza y por la misma razón no aceptaremos que ningún país por la fuerza devuelva a alguien a nuestro territorio", declaró Vulin a la agencia.

   Preguntado sobre qué les ocurriría entonces a los refugiados, dijo que esa no sería responsabilidad de Serbia. "Están en territorio de Hungría y esperamos que el Estado húngaro les trate como debería", defendió.

El Gobierno de Serbia tacha de "inaceptable"

la devolución de inmigrantes por parte de

Hungría

El ministro de Exteriores serbia, Ivica Dacic, ha advertido de que la devolución de inmigrantes por parte de Hungría sería "inaceptable" y ha denunciado que el endurecimiento de los controles internos entre Estados miembro de la UE implican un problema para Serbia, que no forma parte del bloque comunitario.

   Dacic ha comparecido en Praga junto a su homólogo checo, Lubomir Zaoralek, que también ha abogado por una vuelta a la normalidad en las fronteras internas de la UE porque, en su opinión, el flujo de refugiados no da muestras de remitir.

   Hungría ha endurecido este martes los controles en la frontera con Serbia y ha advertido de que detendrá a quienes no pasen por los puestos regulados. El Gobierno de Viktor Orban ha creado zonas de tránsito para gestionar la llegada de inmigrantes y devolverá a Serbia a quienes no sean considerados refugiados.

   Aleksandar Vulin, el ministro serbio encargado de gestionar la crisis, ha considerado que Budapest "tendrá que abrir la frontera" tarde o temprano. "Estamos hablando con los húngaros", ha declarado a Reuters en la frontera, donde cientos de inmigrantes y refugiados ya se están acumulando.