"Hay un grupo entero que ha tomado posiciones enfrente de una comisaría policial y ha comenzado a disparar en todas las direcciones, aunque ahora están arrinconados", ha dicho el parlamentario por Gao Abdoul Abdoulaye Sidibe, a la agencia de noticias Reuters.

   Las tropas malienses, apoyadas por las nigerinas, repelen la última ofensiva de los islamistas, que comenzó el pasado jueves, cuando -según ha reconocido- el MUYAO perpetró un atentado suicida contra un puesto de control del Ejército ubicado a 100 kilómetros de Gao. 

  Apenas 48 después, un nuevo terrorista suicida intentó atacar otra vez el mismo puesto de control, pero esta vez las tropas malienses se lo impidieron, dando lugar a un fuerte enfrentamientos que se ha prolongado durante el fin de semana.  

De acuerdo con Radio France Internationale (RFI), los milicianos del MUYAO se han atrincherado en una comisaría policial, desde donde están lanzando ráfagas de disparos a las tropas malienses, que intentan contener el ataque desde el exterior del edificio. 

  "Los islamistas que se han infiltrado en la ciudad están intentando atacar nuestras posiciones, pero les estamos obligando a retroceder", ha dicho un miembro del Ejército de Malí, en una conversación telefónica con Reuters.

   En este sentido, la cadena francesa ha apunrtado que las tropas africanas ya han conseguido detener a al menos once combatientes yihadistas, aunque todavía no han podido entrar en la comisaría policial. 

  Las autoridades malienses han instado a la población civil a permanecer en sus casas, advirtiendo de que podría haber francotiradores islamistas en distintos puntos de la ciudad. De forma preventiva, las tropas francesas han evacuado a 50 periodistas.  

Entretanto, tropas francesas, malienses y nigerinas patrullan las calles del resto de la ciudad y un helicóptero la sobrevuela para garantizar su seguridad, en lo que RFI ha definido como un escenario de "máxima tensión". 

  La ofensiva sobre Gao es un ejemplo de las nuevas técnicas que estarían siguiendo los yihadistas, optando por los atentados suicidas y la guerra de guerrillas frente a una estrategia militar convencional que con la intervención francesa devino ineficaz. 

  A este respecto, las tropas malienses y francesas han advertido de que todavía hay remanentes islamistas entre las grandes ciudades. "Estamos en una zona muy peligrosa", ha subrayado la fuente militar citada por Reuters. 

  En este sentido, un testigo ha asegurado a la agencia de noticias que ha visto a un grupo de al menos diez combatientes yihadistas en la localidad de Batel, ubicada solo a diez kilómetro de Gao.

CRISIS POLÍTICA 

  La crisis política en Malí se desató el pasado mes de marzo, cuando un nutrido grupo de militares descontentos por la falta de recursos suministrados por el Gobierno para combatir al Movimiento Nacional de Liberación del Azawad (MNLA) en el norte dio un golpe de Estado.  

Aprovechando el caos institucional, los rebeldes tuareg se hicieron con el control de las tres regiones que forman el Azawad -Tombuctú, Kidal y Gao- y proclamaron unilateralmente su independencia, aunque este movimiento no contó con el reconocimiento de la comunidad internacional. 

  Sin embargo, los grupos islamistas presentes en el norte de Malí -Al Qaeda del Magreb Islámico (AQMI), el Movimiento para la Unidad de la Yihad en África Occidental (MUYAO) y Ansar Dine, que posteriormente se ha escindido-, rápidamente expulsaron al MNLA del Azawad, donde, desde entonces, imponen la sharia.

INTERVENCIÓN EXTRANJERA 

  En este contexto, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas autorizó en diciembre la creación de la AFISMA, una fuerza internacional dotada con unos 3.000 efectivos que se desplegará el próximo mes de septiembre para ayudar a las tropas malienses a expulsar a los grupos islamistas. 

  No obstante, debido a las dificultades logísticas, Francia, a petición del Gobierno de Malí, tomó la iniciativa el pasado 11 de enero, iniciando la intervención militar en el país africano. En total, ha desplegado unos 4.000 efectivos. 

  Desde entonces, a las tropas francesas se han sumado las de la Misión Internacional de Apoyo a Malí (MISMA) -principalmente de los países de la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO)-, que alcanzará los 8.000 efectivos.

   Las tropas francesas y malienses han llevado a cabo operativos aéreos y terrestres para proteger Bamako y recuperar las ciudades de Konna, Diabaly, Gao, Tombuctú y Kidal siendo estas tres últimas las conquistas más importantes.