En plena campaña electoral, José Blanco está viendo cómo el caso Campeón le pone contra la espada y la pared. Las informaciones que van saliendo a la luz colocan al actual ministro de Fomento en una situación muy complicada: Este lunes, después de que el diario El Mundo publicara que el caso puede tener ramificaciones en Cataluña, los socialistas de esta comunidad le han pedido explicaciones, mientras que el Partido Popular continúa presionando para conseguir su dimisión.

   Blanco fue relacionado en la supuesta trama para defraudar subvenciones públicas después de que uno de los detenidos, el empresario gallego Jorge Dorribo, acusara al ministro de cobrar comisiones, a través de un primo político, a cambio de gestiones a su favor en Hacienda y Sanidad. La causa está ya en el Tribunal Supremo y, según el citado periódico, la jueza ha apreciado algunos "indicios de delitos de cohecho y tráfico de influencias" en la conducta del actual ministro. Al parecer, se habrían interceptado varias llamadas y mensajes telefónicos que dejarían a Blanco en una posición muy comprometida.   

 Ahora, las últimas informaciones apuntan a que el empresario Dorribo pidió a Blanco que colaborase en la tramitación de una nave industrial en el municipio de Sant Boi de Llobregat (Barcelona), lo que traslada el foco de atención a Cataluña.  

  Ante estos hechos, el secretario de organización del PSC y jefe de la campaña de las generales, José Zaragoza, ha abogado por la plena "transparencia". En declaraciones a la emisora Rac1, recogidas por Europa Press, Zaragoza ha pedido una explicación al ministro.   

 "Lo que se tiene que hacer es transparencia total", afirmó. No obstante, el también número 5 por Barcelona, ha destacado que estas informaciones son muy oportunas para ciertos sectores, en vísperas al único cara a cara entre Rubalcaba y Rajoy, que se celebrará en la noche del lunes. "Son ganas de marcar el debate", ha dicho.

   El PSOE coincide en este sentido con los socialistas catalanes. El ministro de Presidencia y cabeza de lista al Congreso por Álava, Ramón Jáuregui, ha afirmado en Telecinco que es "muy sospechoso que se ponga todo en marcha en un momento tan sensible".  

  "Es inaudito, inclusive que una juez mande al Tribunal Supremo el día anterior del comienzo de la campaña un auto para que se investigue a un aforado", afirmó. "Me parece todo muy extraño, pero tengo la convicción de que Blanco es una persona honrada en todos los aspectos".   

El ministro de Política Territorial y Administración Pública, Manuel Chaves, ha insistido en esta idea. Con ironía, Chaves ha dicho que se trata de "cosas que, evidentemente, han pasado en el inicio de una campaña electoral".

PRESUNCIÓN DE INOCENCIA  

  Al margen de esta cuestión, la mayoría de los miembros del PSOE se han volcado en defender al actual ministro. El titular de Justicia, Francisco Caamaño, ha recordado que "todos son inocentes mientras un juez, en una sentencia, no diga lo contrario" y que no se debería especular sobre un caso que se encuentra bajo secreto de sumario.   

 "Lo mejor es dejar trabajar a los tribunales de justicia y no añadir más comentarios a algo que está bajo la reserva de los jueces y la investigación de los tribunales de justicia", ya que el secreto de sumario, en su opinión, "no permite conocer la realidad de lo que verdaderamente hay".   

Chaves también ha abogado por esperar a un pronunciamiento del Tribunal Supremo. "Vamos a esperar a cuando haya alguna decisión por parte de los jueces", ha dicho.  

  Hasta que ésta no se produzca, no parece que vaya a cambiar el futuro de José Blanco. Al menos, así lo ve Jáuregui, quien se ha mostrado convencido de que el ministro no dimitirá. "Va a seguir como está, ejerciendo sus tareas", remató.

 EL PP INSISTE EN LA DIMISIÓN   

La continuidad de José Blanco como ministro y portavoz en el actual Gobierno es, precisamente, lo que el Partido Popular rechaza. La portavoz del PP en el Congreso de los Diputados, Soraya Sáenz de Santamaría, ha insistido este lunes en la necesidad de que Blanco renuncie a su cargo. Después de conocer que el ministro ha anulado su agenda de actos previstos, Saénz de Santamaría ha pedido que, "puestos a anular su agenda, la anule definitivamente y dimita".  

  A juicio del PP, los mensajes interceptados en la investigación demuestran que "quizá" los delitos que se le atribuyen "tienen una base constatable".    "Este es cada vez más el caso Blanco. Empezamos con la reunión en la gasolinera del ministro con el empresario, seguimos con el primo que contaba los billetes en el bar de la gasolinera y hoy una conversación escandalosa grabada con un empresario con cruce de mensajes", ha criticado.  

  Soraya Saénz de Santamaría ha reprochado al ministro que "se esconda" cuando él "siempre ha exigido responsabilidades a los demás". Por eso, lo que Blanco tiene que hacer, según los populares, es "dejar de esconderse" y dimitir, ya que esa es "la única salida que le queda".   

 El Presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, ha insistido en esta idea y ha contestado al PSOE que, "ante gravísimos delitos", no es suficiente con "reiterar la presunción de inocencia".   

 Otros miembros del PP han ido más allá, al exigir al candidato socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, que anuncie la dimisión del ministro en el debate contra Rajoy de la noche del lunes. Lo hizo Ana Pastor en una comida-mitin en la que coincidió con Feijóo, y lo ha hecho también el secretario de comunicación del partido, Carlos Floriano.   

 En un comunicado, Floriano ha recalcado que "nunca antes en la democracia" había habido una campaña electoral "en la que un ministro estuviese siendo objeto de investigación" y, por eso, Rubalcaba "debería anunciar en el debate la dimisión de Blanco".   

 "Si no impide que vaya a las listas, se estará convirtiendo en cómplice de los indicios que aparecen claramente reflejados en los informes conocidos". "Los españoles no se merecen a Blanco ni como ministro, ni como candidato", remató.