En declaraciones a Europa Press, Moles ha explicado que "estamos abordando la última fase" del Observatorio de Javalambre, previa a su puesta en funcionamiento, fase final que no sólo se refiere a la construcción de la obra civil, sino también "a la puesta a punto y verificación de la calidad de los instrumentos que se están fabricando". De esta forma, ha señalado que "el telescopio pequeño ya está montado en fábrica, pendiente de trasladarse a la montaña".

   El telescopio grande, que "es el más importante y más complejo", también se está ensamblando en fábrica. Es un proceso que durará varios meses puesto que "una vez ensamblado se verificará que todo funciona adecuadamente, luego daremos la aprobación provisional, se desmontará, se transportará al Pico del Buitre y se volverá a montar para hacer la verificación definitiva", ha indicado.

   De ahí, que Mariano Moles considere que esta puesta a punto del Observatorio "se prolongarán durante todo el año", por lo que ha asegurado que "esperamos poder tener montados los dos telescopios en la montaña para este verano". En cuanto a las cámaras de ambos telescopios, el director del CEFCA ha manifestado que ya se ha firmado el contrato para la construcción de la cámara del T80, hasta que llegue se podrá trabajar con una cámara diseñada por el personal del Centro.

   Además, ha recordado que El Observatorio Nacional de Río de Janeiro "no sólo se ha interesado por el proyecto científico, sino que también contribuye de manera muy importante a la financiación de los instrumentos de medida que van asociados a los telescopios para poder tomar los datos necesarios para nuestro proyecto científico".  

  El centro brasileño financiará la construcción de la parte criogénica de la cámara del telescopio T250 del Observatorio de Javalambre, que costará 5,4 millones de euros.

   Mariano Moles ha reconocido que el proceso de construcción de los telescopios "es complejo" porque "no había telescopios parecidos, es radicalmente novedoso en lo que a tecnología se refiere" y ha recordado que "nosotros hemos diseñado conceptualmente el telescopio y tenemos que ir aprobando paso a paso todos sus elementos".  

  Este proceso también incluye los edificios que albergarán los telescopios. Moles ha apuntado que "en este momento, estamos estudiando el proyecto del edificio que albergará el telescopio grande para dar el visto bueno definitivo" porque según, ha dicho, "hasta que el telescopio no ha estado diseñado en todos sus detalles no se ha podido determinar los aspectos más delicados del edificio".

   Por eso, puesto que "tenemos que ir diseñando y controlando todo lo que se ejecuta", ha explicado Moles, "somos una plantilla suficientemente grande". En la actualidad hay 29 trabajadores en el CEFCA, sobre todo ingenieros, doctores y licenciados en astrofísica; además, este 2012 se incorporarán tres trabajadores más, dos en enero y uno en mayo.  

  La sede del CEFCA se encuentra en el Banco de España y una vez que esté en funcionamiento el Observatorio "se controlará a distancia", de forma que "la presencia de personas en la montaña se reduce a lo mínimo, prácticamente los grupos de personas encargadas del mantenimiento de los telescopios", ha concluido Mariano Moles