El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha finalizado su intervención ante el Comité Federal del PSOE poniendo al partido tres tareas -culminar las reformas económicas, competir el 22-M y afrontar las primarias- y ha confiado en que, gracias a su "cerebro femenino", podrá simultanearlas. 

  Zapatero ha subrayado que a pesar de haber anunciado su renuncia a un tercer mandato, éste "no es momento de balance, sino de acción": "Soy presidente del Gobierno, soy secretario general del partido, y voy a ejercer". 

  Además, ha apuntado que tenía "diseñado desde hace mucho tiempo" su plan de renunciar a un tercer mandato y se ha mostrado convencido de que será un éxito: "Nos va a salir bien". 

  Según han informado fuentes del PSOE, así se ha expresado el dirigente socialista en su segunda intervención ante el Comité Federal del PSOE, esta vez a puerta cerrada, pocas horas después de anunciar que no será candidato en 2012 y de escuchar las reacciones de los dirigentes de su partido. 

  Zapatero se ha proclamado "muy orgulloso" del PSOE -incluso desde antes de nacer, ha dicho- y más que nunca en esta legislatura porque, según ha dicho, le ha apoyado y ha sido "como una piña". "Os podéis sentir orgullosos del partido que tenéis", ha añadido. Entre otras cosas, se ha mostrado orgulloso también de la libertad de expresión que ha demostrado tener el partido, permaneciendo "vivos los afectos y los respetos". 

  Ante la perspectiva de las primarias, el líder socialista ha pedido a los suyos que no tengan vértigo porque, a su juicio, las primarias son un orgullo, darán seguridad a los ciudadanos -"les gusta que elijamos democráticamente"-. Sí que hay que hablar de primarias, ha venido a decir, pero para ponerlas en valor.

QUIEN DEBE TENER VÉRTIGO ES EL PP

   Para Zapatero, el que debería tener vértigo es el PP y su presidente, Mariano Rajoy, habida cuenta de su "interpretación muy sui generis" de la democracia, aludiendo así a que Rajoy fue designado por su antecesor. Es más, ha dicho que si el PP también eligiese a sus candidatos en primarias sería un ejemplo de democracia interna.   En el capítulo de críticas al PP, ha ironizado -"es para nota"- con que la crisis en España no haya desgastado sólo al partido del Gobierno, sino también al de la oposición. Habría que hacer un congreso de sociólogos, ha llegado a comentar. El presidente ha finalizado su intervención con un mensaje de ánimo: "Las encuestas no nos deben cambiar a nosotros, sino nosotros cambiar las encuestas", ha recalcado. 

  A su juicio, es significativo que en una legislatura tan dura como esta, con el Gobierno en minoría parlamentaria y con una crisis durísima, el PP no haya podido derrotar al Gobierno.

Zapatero ha rememorado la "durísima noche" del 12 de mayo y la decisión del PP de no apoyar los ajustes y ha considerado que terminar la legislatura será un éxito para el PSOE y un fracaso para el PP. 

  Zapatero ha defendido que la decisión que ha tomado de anunciar que no se presenta a un tercer mandato se enmarca en la normalidad democrática y que, si el partido la asume así, tendrá muchas posibilidades será positivo de cara a las elecciones del 22-M.

LOS CIUDADANOS VALORARÁN AL PSOE 

  Para afrontar la cita electoral, ha pedido a los suyos que salgan a defender la acción del Gobierno, porque "los ciudadanos van a valorar al PSOE como conjunto" y, a su modo de ver, los valorarán mejor cuanto más crean ellos mismos como proyecto.  

   De hecho, ha insistido en que decir PSOE es decir prestaciones sociales, y eso debe permitirles ganar las elecciones en cualquier sitio. Así, ha dejado claro que él va a defender su gestión durante la campaña, empezando mañana mismo en Murcia, donde ya ha adelantado va a "ocuparse un poquito del PP". 

  Pero, antes que las elecciones y que las primarias, ha defendido que ahora la tarea fundamental es "alejar cualquier sombra de duda" sobre la confianza de España -"lo estamos tocando con los dedos de las manos", ha dicho- y ello implica culminar las reformas económicas.