Sagrado Corazón
a Ti me dirijo
en plan de oración.
Teniendo siempre fijo,
tú bendita protección.
Ninguna pena te resulta extraña
danos el perdón.
Vela por nuestra amada España
en toda tribulación.
Los adoradores de ANE y ANFE
ante Ti nos postramos.
Desde el calor de la Fe
al Señor que tanto amamos.
En representación del Consejo Diocesano de la Adoración Nocturna Española, Diócesis de Oviedo,
viajamos mi esposa Olga María Suárez Méndez y yo, al Cerro de los Angeles, para participar en la
Vigilia Nacional del sábado 29 de junio, en conmemoración del Centenario de la Consagración de
España al Sagrado Corazón de Jesús.
La Vigilia se inicia con la procesión de banderas ANE-ANFE de una multitud de secciones de toda
España y coincide este gran acto con la Fiesta de las Espigas de la Sección de la Adoración
Nocturna de la Archidiocesis de Madrid
Posteriormente, junto al monumento al Sagrado Corazón, se celebra la eucaristía presidida por el
Arzobispo Consiliario de la Adoración Nocturna Monseñor D. Manuel Ureña.
En la homilía nos dijo "Estamos llamados a amar. La fuente de la verdad y el amor no existe en la
tierra" "El hambre de amor sólo lo puede saciar el Señor" "Ya que Jesús es el agua y el pan de vida"
"El amor de Dios se ha concentrado en el Corazón de Cristo y en él está la fuente de la verdad y el
amor".
Seguidamente se hicieron unos turnos de vela y se expuso el Santísimo para la adoración de todos
los fieles. Entre los adoradores se encontraba nuestro presidente nacional D. José Luis González
Aullón, con los miembros de su Consejo Nacional u la presidenta de ANFE. Doña Susana
Fernández Guisasola, junto con otros presidentes de las diferentes secciones de ANE y ANFE, y sus
abanderados.
En esta vigilia participaron muchos jovenes de distintos movimientos de la iglesia. Como, por
ejemplo, del movimiento Escola Cordia IESU. Quedé impresionado y muy agradecido al Señor de
la cantidad de jóvenes llamados a la vocación, tanto como sacerdotes, religiosos y religiosas. Una
joven nos dio un testimonio impresionante sobre su conversión. Pasó de quitar vidas con el terrible
pecado del aborto a dar los mejor de su vida a Dios y al bien de los demás, colaborando con las
hermanas de Santa Teresa de Calcuta.
Fue una noche que aproveché para disfrutar del Señor, rezar a esa Santa Madre. Entre mis
intenciones estuvo pedir por la próxima beatificación de nuestro fundador D. Luis de Trelles y
Noguerol.

José Manuel Miranda Alonso.