Lunes, 25 de noviembre de 2024
la izquierda siempre tuvo gran capacidad dde destruccion
Satse muestra su "profunda preocupación" por la "precariedad" de la sanidad pública
"Es increíble la absoluta inacción e incapacidad del Gobierno de España y de los Gobiernos autonómicos ante el tremendo deterioro de nuestra sanidad pública", ha dicho, para recordar que la sanidad pública ha sufrido "una pandemia y ha evidenciado que no es, en absoluto, la mejor sanidad del mundo, ni tampoco la 'joya de la corona', calificativos que solo son aplicables a los profesionales que la sostienen cada día a pesar del desprecio al que son sometidos permanentemente por políticos e instituciones".
Una situación, señala Satse, fomentada política e institucionalmente, que nos ha convertido en "la vergüenza de Europa", con "miles" de personas mayores fallecidas en muchos casos sin recibir la atención "óptima y necesaria", profesionales "sin medidas de protección" y cubriéndose con bolsas de basura, urgencias "colapsadas con personas tiradas en el suelo" y alguna profesión renunciando a la atención presencial y optando por la atención vía telemática o telefónica, mientras las enfermeras mantenían y siguen manteniendo la atención presencial en los hospitales, domicilios y las consultas de los centros de salud.
"A pesar de todo ello, y de las más de 200 medidas aprobadas en el Congreso de los Diputados, y nunca puestas en marcha, en nuestra sanidad pública se sigue apostando por una excesiva medicalización y se prefiere tener que afrontar el cáncer de una persona en lugar de prevenirlo, con las consecuencias de riesgo para la vida, coste social y también coste económico que provocan estas situaciones y otras parecidas", ha detallado la organización sindical.
Asimismo, el sindicato ha aseverado que la inversión sanitaria pública ha disminuido un 11 por ciento desde 2009 y el gasto por habitante de la sanidad pública de 2009 a 2019 ha crecido solo un 6,25 por ciento, mientras que en países del entorno europeo ha crecido de manera sustancial, caso de Grecia, un 75 por ciento; Alemania, un 35 por ciento; Estonia, un 60 por ciento; Austria, un 25 por ciento; Finlandia, un 26 por ciento o Turquía, un 79 por ciento.
Por otro lado, continua Satse, la inversión en Sanidad Pública en 2019 en España fue del 6,3 por ciento del PIB y un consolidado autonómico del 5,9 por ciento, mientras que en Europa la inversión es altamente superior, tal es así en Alemania con un 9,7 por ciento del PIB; Francia un 9,4 por ci4ento; Suecia, un 9,3 por ciento del PIB; Dinamarca, un 8,5 por ciento; Bélgica un 7,8 por ciento; o Noruega un 8,7 por ciento.
Según el sindicato, a pesar de esta "brutal situación" de falta de inversión en la sanidad pública, la previsión del Gobierno hasta 2025, lejos de consolidar la del 2020 con un 7,9, la reduce al 6,7 por ciento del PIB, "un auténtico despropósito" tanto del Gobierno como de las distintas comunidades autónomas.
"No es posible continuar así, nuestra Sanidad Pública requiere y exige una inyección presupuestaria de medios, de recursos y de reconocimiento laboral y retributivo de sus profesionales y lo requiere con extrema urgencia, salvo que quienes tienen la responsabilidad política e institucional de protegerla y fortalecerla hayan decidido abandonarla a su suerte, lo cual, a la vista de la situación actual, parece que es así", ha recalcado el sindicato.
Es "urgente", según Satse, que el Ministerio de Sanidad tenga "verdadero poder político y fortalezca de forma real su capacidad de liderar, planificar y coordinar con rigor y firmeza" la política sanitaria a través del Consejo Interterritorial y que, al mismo tiempo, el Consejo de Ministros le dé "respaldo y fortaleza política sin fisuras y creyendo de verdad" en la Sanidad Pública y sus profesionales.
Por otro lado, y mientras esto ocurre en la sanidad pública, la organización sindical ha avisado de que la Sanidad Privada "crece exponencialmente e incrementa su volumen de negocio". "Un volumen de negocio que no repercute positivamente en la mejora de las condiciones laborales de los compañeros de la Sanidad Privada, y todo esto ocurre mientras los quirófanos, las consultas externas y la realización de muchas pruebas diagnósticas de nuestra sanidad pública funcionan de manera ordinaria y normalizada sólo de lunes a viernes y de 8.00 a 15.00 horas", ha apuntado.
En este sentido, ha recordado que, en los últimos años, las pólizas de Sanidad Privada han crecido un 7,2 por ciento, a pesar de que con frecuencia la letra pequeña de las pólizas establece requisitos que dificultan el acceso a algunos tratamientos y determina copagos o periodos de carencia elevados.
"Es evidente que el deterioro de la sanidad pública hace crecer sin parar a la sanidad privada, algo que gobiernos e instituciones deberían corregir con urgencia si queremos priorizar de verdad nuestra sanidad pública respecto de la sanidad privada. Resulta paradójico que el creciente desarrollo de la sanidad privada cuente con frecuencia con la complacencia y estímulo de políticos y consejerías de salud y opten por derivar dinero público a la sanidad privada en lugar de optimizar el rendimiento de nuestra sanidad pública y mejorar las condiciones laborales de nuestros profesionales", ha zanjado
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