Los combates que estallaron en la tarde del sábado en algunos puntos de Trípoli con la insurrección de la población se han extendido e intensificado este domingo, animados por la cercanía de las columnas de las milicias sublevadas contra el régimen de Muamar Gadafi, que habrían llegado incluso al límite occidental de la ciudad.   

 Los corresponsales de los medios internacionales que viajan con los rebeldes han informado de que ya han alcanzado Trípoli, procedentes de Zawiya --bajo control absoluto de los rebeldes tras una semana de combates--, y diversas fuentes han confirmado que hay gente que ha salido a las calles para celebrar la llegada de los insurgentes.  

  Mientras, en el centro, los corresponsales concentrados en el lujoso hotel Rixos continúan informando de intensos combates y explosiones al este, oeste y sur del centro de la ciudad.   

 Los periodistas han podido constatar que en las últimas horas se han producido intensos combates y fuentes del régimen han informado a la agencia de noticias Reuters en declaraciones bajo condición de anonimato de que durante la noche habrían muerto al menos 376 personas de ambos bandos y que los heridos superan el millar.  

  Los rebeldes estarían intentado hacerse con el control de la base aérea de Mitiga, emplazada en el barrio tripolitano de Tajoura, situada precisamente junto al aeropuerto internacional de Trípoli, un objetivo estratégico.  

  Estos esfuerzos de las milicias rebeldes están recibiendo el apoyo de la aviación de la OTAN, aunque la actividad, según han reconocido fuentes de la británica RAF, es cada vez menor debido al avance de los insurgentes. Además, desde Misrata habrían llegado a Trípoli por mar un contingente de unos 200 combatientes para ayudar a los sublevados de la capital.

   Los insurgentes han logrado los avances más importantes en la región situada al oeste de la ciudad, donde habrían tomado el cuartel de la conocida como Brigada Jamis, unidad de élite de la milicia gadafista bajo mando de Jamis Gadafi, uno de los hijos del líder libio. En el este, la artillería del régimen habría conseguido frenar el avance de los rebeldes.

GADAFI PROMETE LUCHAR "HASTA EL FINAL"   

En la vertiente de la propaganda, este domingo la televisión estatal libia ha difundido un nuevo mensaje de audio de Muamar Gadafi en el que ha realizado un nuevo llamamiento al pueblo libio a sumarse a su bando en la lucha contra los sublevados y ha prometido que no abandonará el poder, que se quedará en Trípoli "hasta el final".   

 "Hasta la última gota de sangre estaremos aquí defendiendo la ciudad", ha afirmado Gadafi en su discurso, según él, desde Trípoli, aunque han comenzado a circular rumores de que podría estar en el sur del país o en la frontera con Argelia.  

  Gadafi ha señalado que "teme que Trípoli arda en llamas" y emplaza por ello a los libios a que se dirijan desde todas las regiones del país hacia la capital para liberarla. "La batalla se decidirá por el pueblo, por la masa de todos los libios que deben venir a Trípoli", ha indicado. En ese sentido, ha prometido que repartirá armas para combatir a los rebeldes.

   El dirigente libio ha concluido su intervención prometiendo la victoria. "No necesitamos rendirnos a los traidores. Nunca nos rendiremos. Venceremos, venceremos", ha proclamado.