Miercoles, 27 de noviembre de 2024
El retorno de los brotes (verdes, claro)
Desde que aquella, con gran cariño recordada ministra, sorprendió gratamente a todos cuando dijo que observaba el nacimiento de "brotes verdes" en nuestra economía, no había yo tenido ocasión de utilizar hasta ahora tan ingeniosa frase para enriquecer mi limitado léxico y ¡hete aquí! que hoy me parece oportuno traerla a colación, no con motivo económico, sino político.
El PP ha celebrado un congreso extraordinario. Falta hacía realmente que se viese en movimiento a los cansinos, en general, componentes de las altas esferas peperas.
Ahora, por fin, los vimos moverse a la vista de ese congreso para situar candidatos a la presidencia, cargo que se iba a elegir en dicho congreso.
No puedo negar que a mí siempre me atrajo la figura de Pablo Casado y mi buena impresión aumentaba cuando noté que iba siendo postergado sutilmente dentro del partido, dándole, por otra parte, puestos de cierto relieve pero que, a la larga, no servían precisamente para promocionar su figura.
Por eso me vi gratamente sorprendido cuando me enteré que este hombre se presentaba, lanzándose sin paracaídas, al cargo citado anteriormente en competencia con otros pero sobre todo con Soraya Sáenz de Santamaría, pieza fundamental dentro del desgraciado aparato del desgraciado partido en que se había convertido el PP hacía ya demasiado tiempo.
Yo pensaba que para aventuras con la Santamaría, bastaban las corridas por Colón con su carabela cuando tuvo la desgracia, según la "nueva historia" de descubrir América y que este hecho fué el principio del exterminio (siempre según "la nueva historia) de la refinada civilización indígena que disfrutaba matándose unos a otros y sacando corazones con sus hermosos cuchillos de obsidiana, para ofrecerlos a sus dioses y comiéndose muy guapamente el resto del cuerpo, eso sí, siempre que fuese de un enemigo. La verdad, solo a Colón se le ocurre, no descubrir, sino tropezar con América, cuando no contaba que ese continente estaba en su camino desde tiempos realmente inmemoriales.
Bueno, veo que estoy cambiando de continente y de tema, deteniéndome en batallas que no vienen a cuento. Pido disculpas al sufrido lector que haya tenido la paciencia de llegar hasta aquí y, por lo tanto volvamos al tema y a los brotes.
Seguí con interés el desarrollo del congreso susodicho y, sobre todo, oí y después leí y releí los discursos previos a la elección, pronunciados por los dos candidatos supervivientes.
Para mí, el discurso de Soraya quedó a cien años luz del correspondiente a Pablo. El de aquélla estuvo lleno de alusiones a lo bien que lo habían hecho, vamos a decir, ella y lo suyos a la vista de los resultados (esto me parece que se llama pragmatismo). También aludió a lo bien que lo iban a hacer en el futuro, dada su experiencia y valorando el que ella había sido elegida por las bases (esto creo que se llama demagogia). Un discurso mil veces oído y muy carente de un contenido realmente práctico, cayendo en la pura teoría, en fin, lleno de aire, vacío de primicias esperanzadoras.
Sin embargo, el discurso de Pablo corrió por otros derroteros: fué un discurso mucho más sólido, el discurso de un líder conocedor experto de la realidad actual, en el que tocó todos los temas que hoy preocupan de verdad, desde la economía a la familia, pasando por la eutanasia, etc., dejando asomar un proyecto sólido, producto, como decíamos, de un más que buen conocimiento de la realidad. ¿Con algún toque de demagogia? (para los exigentes), algo difícil de eludir en casos como este.
Este es el brote verde del título: un nuevo líder para un viejo y ajado partido. Espero que a Pablo Casado no le moleste el que yo lo llame brote verde. A él le toca ir madurando a marchas forzadas pero sin tropiezos. Desde luego, nombre de líder no le falta: recordemos al quizá máximo protagonistas de los "Hechos de los apóstoles".
Bien: estas son mis humildes ideas y esta es mi prudente esperanza sobre el nuevo presidente del PP, un hombre que no se corta para exponer su ideología de centro-derecha, siendo la derecha palabra maldita hoy día y vergonzosamente ocultada muy generalmente por nuestros políticos acomplejados.
A ver si terminamos de una vez con la indiferencia ante tanta falta de ideas, suplidas con ataques al pasado, gracias a la detestable "Memoria histórica", que en su afán de desenterramientos va a llenarnos el país de ilustres "zombies" con acompañamiento de inmigrantes por doquier.
Para final y para Pablo, una frase de otro Pablo, el de Tarso: "Veo los peligros de la vida presente: peligro en en el mar, peligro en la tierra y peligro en los falsos hermanos" (que haber, haylos, añado yo).
Francisco Alonso- Graña del Valle.
Comentarios
Por Jesús Gómez García 2018-08-27 20:57:03
Creo que somos muchos que estamos esperanzados con el nuevo Presidente del PP. Y no hay tiempo que perder, porque el panorama político no puede ser peor.
Por JESUS GOMEZ GARCIA 2018-07-27 13:30:53
De acuerdo con el artículo y ahora expectantes para comprobar que el PP se regenera y nos libra de un Gobierno como el actual.
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