Jueves, 16 de enero de 2025
carta semana del arzobispo de oviedo
En pie de guerra
Declararon la guerra. Fue un grupo de mujeres con un corazón tan grande que casi les cabía. Pero decidieron encararse con el hambre y desde entonces con ella guerrean. Son las mujeres que dieron comienzo hace sesenta años a Manos Unidas. Y cada año, comenzando febrero nos vuelven a presentar su campaña contra el hambre. Este año el lema es "comparte lo que importa". Lo único importante es el amor, especialmente cuando en ello te va la vida y la de tantas personas.
No escampa la pandemia, y tras tanto progreso y tanta comunicación en tiempo real, seguimos lamentando que haya pueblos con personas que tienen nombre y edad, que sencillamente se mueren de hambre. El hambre de los hombres, ese azote que siempre nos deja mal a gusto "como decimos en Asturias", porque nos asoma a una realidad que nos señala inevitablemente sea cual sea nuestra responsabilidad. El hambre de tantas personas no es algo ajeno que podamos nosotros sacudirnos de la conciencia como si se tratase de un problema político, económico o demográfico que no nos afecta a cada cual.
De hecho, la gran invitación de Jesús en un momento de su predicación traspasa todos los tiempos y todos los lugares, para tener que escuchar como dirigido a nosotros lo que entonces "para sorpresa de sus discípulos", dijo en aquel día junto al mar: "dadles vosotros de comer" (Mt 14, 13-21). El agobio de aquellos discípulos era que les desbordaba tamaño desafío y prefirieron despedir a los hambrientos, mandarles a sus casas, quitárselos de encima sin más. Esa tentación siempre ha acompañado el egoísmo insolidario del hombre que cierra sus puertas para no acoger y más aún sus ojos para no ver. Los pobres lo saben y por eso saben a qué puertas no llamarán y qué miradas jamás se conmoverán cuando ellos pasen.
¡Qué desproporción tener que dar de comer a multitudes con sólo dos peces y cinco panes! Es nuestra humilde aportación. Con ella Jesús hace el milagro. Ni un milagro que confiamos sólo a la acción de Dios, ni un milagro fruto de nuestro cálculo. El milagro siempre se da cuando nosotros hemos dado todo lo que somos y tenemos, y con ello el Señor hace maravillas como una caricia de amor. No era un problema de Dios, nada más. Era un problema de ellos, porque aquella hambre, Jesús se la confiaba a sus discípulos. Ellos pusieron la poquedad de unos panes y peces, y con eso el Señor repartió su grandeza hasta la saciedad.
El Papa Francisco nos pone a todos ante el quicio de lo que realmente es importante: amar a Dios y amar lo que Dios ama: sus hijos, nuestros hermanos, de modo especial quienes están necesitados de una cercanía que se traduzca en gestos de amor, capaces de anunciar una Buena Noticia mientras denuncian las noticias que genera el pecado de egoísmo, de injusticia y violencia.
Hace unos meses dijo a un grupo de voluntarios cristianos que trabajan por los pobres: «tened esperanza mirando hacia adelante. Porque cuando miramos atrás siempre quedamos aprisionados por la dificultad de las tribulaciones, los problemas y esas cosas que suceden en la vida y que nos hacen sufrir. Muchas gracias por lo que estáis haciendo? es la caricia de la Iglesia a su pueblo. La caricia de la Madre Iglesia a sus hijos, la ternura, la cercanía». Palabras bellas que no representan un piadoso brindis al sol, sino el compromiso en primera persona de quien diciéndonos esto nos está a todos confirmando en la fe.
Esto es lo importante que vale la pena compartir. Como hace Manos Unidas y tantos otros cristianos en su lucha contra el hambre y contra toda penuria que por destruir al hombre, ofende al mismo Dios.
Columnistas
La subida global de temperaturas y la conveniencia de ir sustituyendo las fuentes de energía tradicionales (gas, petróleo y carbón) por otras más sostenibles es un tema de permanente actualidad tanto en los medios de comunicación como en la política. Frente a la versión aplastantemente mayoritaria del problema y sus soluciones, el ciudadano atento y bien informando acaba descubriendo algunos problemas a los que no se les presta demasiada atención. En este artículo se presentarán algunos de ellos
Por Francisco Javier Garcia AlonsoLeer columna
La propuesta que más influyó para atraer el voto de muchos europeos hacia las nuevas derechas es el rechazo a las políticas que facilitan la inmigración incontrolada, pues están convencidos de que aumenta la delincuencia y favorece la islamización de Europa
Por Angel Jiménez LacaveLeer columna
La alternativa a la "justicia social" no es un escenario de pobres muriéndose en las aceras por falta de recursos para pagarse un hospital. La alternativa sería una sociedad en la que, con una presión fiscal que fuese muy inferior a la actual, la gran mayoría de la gente se las arreglase muy bien por sí misma, sin depender de papá Estado. Publicado en el centro Covarrubias
Por Francisco J Contreras Leer columna
Este hombre de 82 años ha hecho más daño al sanchismo en dos meses que Feijóo y sus diputados en esta legislatura
Por Rafael Sánchez SausLeer columna
En su libro “Agenda 2033, nueva y eterna”, Eduardo Granados presenta una propuesta para que pongamos nuestra mirada en 2033, fecha en la que se cumplen dos mil años de la Redención. En 2033 confluyen las celebraciones del bimilenario de la institución de la Eucaristía, de la muerte y resurrección de Cristo y del nacimiento de la Iglesia. En esta entrevista el autor nos da las claves de esta original propuesta.
Por Teodoreto de Samos Leer columna
Detrás de tanta normativa milimétrica se agazapa una desconfianza descomunal en la gestión privada, que actúa como un implícito reproche moral. Publicado en El Debate
Por Enrique García MáiquezLeer columna
Occidente no perdió el rumbo en 1776, sino en 1917 y 1968.
Por Francisco J Contreras Leer columna
Sólo el advenimiento de los Reyes Católicos, y el resultado de su prodigiosa obra, pudo superar, andando el tiempo, esa primacía en la memoria de los castellanos. Pero para ello hubieron de pasar casi doscientos cincuenta años Publicado en El Debate
Por Rafael Sánchez SausLeer columna
Cabe resaltar aquí lo afirmado por el fiscal jefe de la Audiencia Nacional: "En definitiva, da igual el explosivo que se utilizara, lo cierto es que todas las pruebas apuntan a que estos personajes fueron los que cometieron ese atentado y la trama asturiana proporcionó los explosivos" (sic).
Por Ana María Velasco Plaza Leer columna
El papel rector de la Comisión Europea —que concentra todo el poder ejecutivo y gran parte del legislativo de la UE, pero no responde ni ante los Gobiernos nacionales, ni ante los ciudadanos europeos ni ante el Parlamento Europeo— es el principal instrumento de ese proceso de supranacionalización Publicado previamente en LA GACETA
Por Francisco J Contreras Leer columna