Miercoles, 27 de noviembre de 2024
Cuenta con que España mantenga su política fiscal y no caiga en una "crisis constitucional" tras las elecciones generales
Fitch confirma el rating 'BBB+' de España y mejora sus previsiones de crecimiento
Fitch ha señalado como uno de los "factores clave" para tomar esta decisión el hecho de que "la economía española se está recuperando fuertemente, aumentando la confianza en un exitoso ajuste (fiscal) en el seno de la eurozona".
La agencia ha destacado que el crecimiento de España se ha acelerado desde la última revisión crediticia, realizada el pasado 24 de octubre, llegando al dos por ciento en el último trimestre de 2014 y "superando no solo a la eurozona, sino también a Alemania".
Fitch prevé un crecimiento del PIB, propiciado fundamentalmente por el aumento de la demanda interna, del 2,5 por ciento para este año y del 2,3 por ciento en 2016, desde el 0,8 y el 0,4 por ciento, respectivamente, de la anterior revisión crediticia.
"Tanto los factores externos como los internos han apoyado esta recuperación. En particular la positiva retroalimentación entre el aumento de la confianza --favorecida por las facilitación de las condiciones financieras y una tasa de empleo mayor por las reformas laborales-- y el creciente consumo doméstico", ha explicado.
Al margen del crecimiento económico, Fitch ha pronosticado que la tasa de empleo --cuya mejora es uno de los principales retos de España-- aumentará progresivamente, de modo que el paro se situará en el 21 por ciento en 2016 desde el 24,4 por ciento de 2014 y el 26,1 por ciento de 2013.
En cuanto al déficit presupuestario, Fitch ha indicado que "la fuerte recuperación y la facilitación de las condiciones financieras han tenido un impacto favorable" en el ajuste de las cuentas públicas. Así, vaticina que bajará desde el 5,8 por ciento de 2014 hasta el 4,5 por ciento este año y el 3,4 por ciento en 2016.
En cambio, la deuda pública seguirá creciendo, conforme a las previsiones de Fitch. El 97,7 por ciento de 2014 aumentará al 101 por ciento en 2016, pero comenzará a caer en los años siguientes hasta llegar al 91 por ciento en 2024.
La agencia ha subrayado que todas estas proyecciones "se basan en la asunción de que la actual política fiscal se mantendrá en términos generales después de las elecciones generales, de que no habrá crisis constitucional y de que los sucesivos gobiernos españoles mantendrán el ratio deuda pública/PIB en una tendencia descendente durante la última mitad de la década".
También ha mencionado como factor a tener en cuenta para el desarrollo de la economía española la permanencia de Grecia en la eurozona, aunque ha sostenido que, la eventual salida del euro por parte de Atenas, "no provocaría una crisis sistémica como la de 2012".
La última vez que Fitch Ratings revisó la calificación de España fue el pasado 24 de octubre, cuando confirmó la nota en su nivel actual tras elevarla en un escalón hace justo un año.
De esta manera, Fitch mantiene la nota de España en un nivel más elevado que el resto de las principales agencias de calificación, ya que S&P la confirmó hace dos semanas en 'BBB' con perspectiva 'estable' y Moodys la sitúa en 'Baa2' con perspectiva 'positiva'.
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