Miercoles, 27 de noviembre de 2024
Denuncia que al no haberlo hecho hasta ahora "España está renunciando tácitamente a los derechos que le corresponden"
Vox propone el trazado de líneas de base rectas en torno a Ceuta y Melilla para delimitar correctamente las aguas
Los de Santiago Abascal han presentado una proposición no de ley en este sentido en el Congreso de los Diputados, a la que ha tenido acceso Europa Press, con vistas a su discusión en la Comisión de Agricultura, Pesca y Alimentación.
Para ello, se amparan en lo estipulado en la materia en el Convenio de la ONU sobre el Derecho del Mar (CONVEMAR) y en concreto lo relativo a las líneas de base rectas, que se suele aplicar "a aquellos litorales que presentan configuraciones costeras complejas" con el fin de "evitar el trazado de una línea de bajamar que siga toda la sinuosidad de la costa, ya que las líneas de base rectas se trazan uniendo entre sí sus extremos".
La ley española en la materia, de 1967, se decanta por las líneas de base de bajamar escorada, aunque deja abierta la puerta a las líneas rectas "para aquellos lugares en que lo estime oportuno" el Gobierno.
Vox recuerda en este punto los "problemas a la hora de delimitar los espacios marítimos" que tiene España con Marruecos, que atribuye al hecho de que no hay un "acuerdo o convenio" con el reino "para la delimitación de dichos espacios entre los dos países.
Asimismo, añade en su exposición de motivos, "nuestro país no ha establecido líneas de base rectas en las zonas donde se encuentran Ceuta y Melilla, sino que utiliza la línea de base normal en la delimitación de nuestras aguas de soberanía o jurisdicción", mientras que Marruecos "sí trazó las líneas de base rectas (...) encerrando dentro de las aguas interiores marroquíes a Ceuta y Melilla, a las islas Chafarinas y a los peñones".
España presentó una protesta formal ante este hecho pero la situación se vio agravada, recuerda Vox, con la construcción del puerto de Beni Enzar en la zona de Melilla.
Pese a que Marruecos "respeta el derecho de paso a los buques que entran y salen de estas aguas sin generar conflicto", el partido considera "necesario que el reino alauí reconozca la soberanía española sobre nuestras plazas del norte de África y respete a su vez nuestros derechos de explotación sobre las mismas" conforme a la CONVEMAR.
Así las cosas, subrayan que "el problema que emerge tanto en las aguas de Ceuta como en las de Melilla es que sus líneas de base recta todavía no han sido trazadas y, consecuentemente, España está renunciando tácitamente a los derechos que le corresponden en igualdad de condiciones al resto de las regiones del Estado".
Además, inciden en que aunque un real decreto de 1977 "abordó la cuestión del trazado general de las líneas de base recta a lo largo de las costas españolas, dejó pendiente el trazado del litoral de Ceuta y Melilla para no causar un conflicto diplomático con Marruecos" mientras que este país "ha venido históricamente delimitando en su legislación interna esas aguas españolas como propias y reclamándolas en el seno de los organismos internacionales ante la pasividad de España".
Por todo ello, los de Abascal quieren que el Congreso inste al Gobierno a "adoptar todas las medidas que sean necesarias al objeto de establecer finalmente el trazado de líneas de base rectas en las zonas donde se encuentran Ceuta y Melilla, con el fin de delimitar correctamente nuestras aguas de soberanía o jurisdicción, especialmente a efectos de pesca".
En concreto, plantean que se modifique el citado real decreto de 1977 "con el fin de que recoja las nuevas líneas de base recta en las zonas de Ceuta y Melilla" y que se envíe a la Secretaría General de la ONU "para su debida publicidad una carta marina o lista de coordenadas geográficas correspondientes a las aguas jurisdiccionales" de las dos ciudades autónomas.
Los de Santiago Abascal han presentado una proposición no de ley en este sentido en el Congreso de los Diputados, a la que ha tenido acceso Europa Press, con vistas a su discusión en la Comisión de Agricultura, Pesca y Alimentación.
Para ello, se amparan en lo estipulado en la materia en el Convenio de la ONU sobre el Derecho del Mar (CONVEMAR) y en concreto lo relativo a las líneas de base rectas, que se suele aplicar "a aquellos litorales que presentan configuraciones costeras complejas" con el fin de "evitar el trazado de una línea de bajamar que siga toda la sinuosidad de la costa, ya que las líneas de base rectas se trazan uniendo entre sí sus extremos".
La ley española en la materia, de 1967, se decanta por las líneas de base de bajamar escorada, aunque deja abierta la puerta a las líneas rectas "para aquellos lugares en que lo estime oportuno" el Gobierno.
Vox recuerda en este punto los "problemas a la hora de delimitar los espacios marítimos" que tiene España con Marruecos, que atribuye al hecho de que no hay un "acuerdo o convenio" con el reino "para la delimitación de dichos espacios entre los dos países.
Asimismo, añade en su exposición de motivos, "nuestro país no ha establecido líneas de base rectas en las zonas donde se encuentran Ceuta y Melilla, sino que utiliza la línea de base normal en la delimitación de nuestras aguas de soberanía o jurisdicción", mientras que Marruecos "sí trazó las líneas de base rectas (...) encerrando dentro de las aguas interiores marroquíes a Ceuta y Melilla, a las islas Chafarinas y a los peñones".
España presentó una protesta formal ante este hecho pero la situación se vio agravada, recuerda Vox, con la construcción del puerto de Beni Enzar en la zona de Melilla.
Pese a que Marruecos "respeta el derecho de paso a los buques que entran y salen de estas aguas sin generar conflicto", el partido considera "necesario que el reino alauí reconozca la soberanía española sobre nuestras plazas del norte de África y respete a su vez nuestros derechos de explotación sobre las mismas" conforme a la CONVEMAR.
Así las cosas, subrayan que "el problema que emerge tanto en las aguas de Ceuta como en las de Melilla es que sus líneas de base recta todavía no han sido trazadas y, consecuentemente, España está renunciando tácitamente a los derechos que le corresponden en igualdad de condiciones al resto de las regiones del Estado".
Además, inciden en que aunque un real decreto de 1977 "abordó la cuestión del trazado general de las líneas de base recta a lo largo de las costas españolas, dejó pendiente el trazado del litoral de Ceuta y Melilla para no causar un conflicto diplomático con Marruecos" mientras que este país "ha venido históricamente delimitando en su legislación interna esas aguas españolas como propias y reclamándolas en el seno de los organismos internacionales ante la pasividad de España".
Por todo ello, los de Abascal quieren que el Congreso inste al Gobierno a "adoptar todas las medidas que sean necesarias al objeto de establecer finalmente el trazado de líneas de base rectas en las zonas donde se encuentran Ceuta y Melilla, con el fin de delimitar correctamente nuestras aguas de soberanía o jurisdicción, especialmente a efectos de pesca".
En concreto, plantean que se modifique el citado real decreto de 1977 "con el fin de que recoja las nuevas líneas de base recta en las zonas de Ceuta y Melilla" y que se envíe a la Secretaría General de la ONU "para su debida publicidad una carta marina o lista de coordenadas geográficas correspondientes a las aguas jurisdiccionales" de las dos ciudades autónomas.
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