Viernes, 26 de abril de 2024
un mundo sin dios
La declaración de derechos humanos
En nuestros días, la Declaración de derechos humanos es considerada como el fundamento ideológico del mundo occidental, especialmente en su versión moderna, es decir, la que se proclamó en la fundación de las Naciones Unidas.
Con todo, tales declaraciones y la que se llevó a cabo en EEUU con motivo de su independencia tienen puntos débiles que Messori analiza lúcidamente en su libro Leyendas negras de la Iglesia.
En primer lugar, en todos los casos, se presentan como un logro de la razón humana y sin ningún fundamento religioso. Eso es consecuencia directa de las sangrientas guerras de religión del siglo XVI en Francia y sobre todo de la Guerra de los treinta años en la Europa del siglo XVII. A partir de la paz de Westfalia (1648) quedó claro que si se requerían amplios consensos había que legislar sin acudir a una religión que legitimara las leyes que se propusieran.
Pero la determinación de prescindir de Dios presenta, a su vez, algunos inconvenientes. La historia muestra que las leyes acaban corrompiéndose. Este hecho está brillantemente expuesto en el famoso relato ?Granja de Animales? de George Orwell en aquella famosa frase: ?Todos los animales son iguales, pero hay unos animales que son más iguales que otros?. Esa desviación hacia el mal en el cumplimiento de las leyes va aparejada a la condición humana y hay que contar con ella. Lo que ocurre es que en las leyes de fundamento judeo-cristiano las desviaciones han sido siempre combatidas por los profetas y santos suscitados por Dios y el martirio de estos profetas acaba suscitando, a la larga, la rectificación de los errores. A este respecto baste recordar la lista de obispos y clérigos muertos a causa de sus acertadas denuncias.
En cambio, las desviaciones de las leyes sin fundamento religioso no siempre se corrigen si no que con el paso del tiempo se acentúan más. Así, en este momento, los derechos civiles no sólo son pisoteados con total impunidad en China y lo que queda de los países comunistas y en muchos países musulmanes, sino que además en Occidente el aborto está siendo incluido en la lista de derechos.
El segundo punto débil es que las Declaraciones de derechos humanos nunca son compensadas con una declaración paralela de obligaciones. Aunque este error ha sido puesto de manifiesto en alguna ocasión, nunca ha sido corregido. La consecuencia de este planteamiento se puede percibir nítidamente en nuestros días. Proliferan las reclamaciones de todo tipo de derechos supuestos o reales pero nadie se atreve a hablar de obligaciones, ni en la familia ni en la sociedad.
Y es que, como se dice en el evangelio de san Juan el sarmiento que no está unido a la vid acaba muriendo o como san Mateo pone en boca de Jesucristo ?el que no recoge conmigo desparrama?.
Comentarios
Por Visor 2014-04-20 11:08:35
Aunque en religión no lo tengo tan claro aún supongo que hay normativa positiva de hacer y otra negativa de no hacer (bien y mal p. ej.) Parecería en principio que es mejor la negativa: no hacer. La de hacer o no, queda al albedrío de cada cual. No se puede imponer normativa que en si misma no es obligatoria para todos. Otra cosa es que muchos dicen que la Iglesia Católica debe recibir un trato igual por los poderes públicos que otras religiones. No es así, tenemos una larguísima tradición, que incluso llegó a la sangre,que no se puede obviar por parte de fundamentalistas de signo contrario.
Por Visor 2014-04-20 11:01:32
Se comió el programa lo dicho por el filosofo Savater en un hilo anterior en su entrecomillado: Las creencias son un derecho, no un deber y por eso no se pueden imponer, es algo voluntario. No es textual pero es en esencia lo que quiere expresar.
Por Visor 2014-04-19 19:59:18
De Messori entre otros son el libro con la entrevista al Papa Juan Pablo II, Por qué creo e Hipótesis sobre María. Todos ellos estupendos. No he leído el citado en el artículo pero he de buscarlo; lo mismo me ocurre con Dios existe, yo lo he encontrado de Froissard. Orwell aparte de Rebelión en la granja y 1984 tiene también Homenaje a Cataluña donde narra sus experiencias en nuestra guera civil con las Brigadas Internacionales, perteneciente al POUM salvó la vida de casualidad. A Nin, poumista enfrentado al PCE lo despellejaron vivo.
Por Visor 2014-04-19 19:51:18
Casualidad: abro un minuto esta tarde de Sábado Santo Intereconomía y oigo a Fernando Savater decir lo siguiente sobre la enseñanza de religión en las escuelas:<
Por McLauglin 2014-04-18 11:40:30
Vale todo con tal de prescindir de la religión cristiana. El imperio tiránico de la razón (Zubiri dixit) arrasa, vapulea, obnubila, entontece y crea "idiotas útiles". ¡Ah!, ¿no se puede arreglar el problema de las interrogaciones y las comillas?. Lo hemos visto en varios artículos. Hace muy mal efecto.
Por Sochantre 2014-04-17 20:16:35
(Lástima del problema técnico de las comillas que se convierten en anárquicas interrogaciones). Muy claro D. Francisco. Envidio su capacidad de síntesis. Si los derechos no son acompañados de obligaciones, la cojera de las declaraciones y de las leyes es evidente. El, llamemos juego, resulta incompleto. A ver si algún día vemos publicada una" Declaración de las obligaciones humanas". Por el momento, contentémonos con la lectura bien meditada de los evangelios. Seguro que ahí encontraremos muy claros, tanto derechos como obligaciones. Digo yo, no sé si acertadamente.
Por MIRANDA 2014-04-17 12:57:13
Hemos de tener en cuenta que,nuestros derechos terminan donde empiezan los derechos de los demás.Y que ,el más fundamental de los derechos humanos,es el derecho a la vida
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