Además, constata la integración en una misma lista de Podemos y Más País, tras el conflicto interno que supuso la escisión de los partidarios de Íñigo Errejón y la posterior creación de este partido.

Al filo de la medianoche ambas formaciones, junto a IU, Equo, Alianza Verde e Iniciativa del Pueblo Andaluz, lograban un acuerdo político para articular esta lista de confluencia, que venía gestándose desde febrero.

Esa pulsión de ensanchar el espacio progresista viene desplegándose desde la salida del exlíder del espacio Pablo Iglesias por medio de la dirección de Podemos, que llamó a tejer alianzas con la sociedad civil y otras formaciones para el ciclo electoral de 2023, de IU con una apuesta por la unidad popular que aumente la base de Unidas Podemos.

Pero sobre todo ha influido la posición de la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, que desde el liderazgo del espacio confederal ha proclamado su intención de promover una nueva plataforma, aunque sin confirmar que sería candidata, con un horizonte electoral.

Es más, durante este tiempo ha dado pinceladas de este proyecto, que quiere empezar con un proceso de escucha, con carácter transversal, no limitado a la izquierda del PSOE y donde la ciudadanía debe tener el protagonismo y donde estén también los partidos, pero en un rol más secundario.

Esa actitud de buenas relaciones con todo el espacio de izquierda alternativo al PSOE lo ha demostrado en algunos gestos, como el haber compartido actos con dirigentes de Compromís y Más Madrid, además del propio Errejón.

Su implicación en este frente amplio ha sido reconocido por el dirigente de Podemos, Juan Antonio Delgado, y se apreció también el pasado jueves, cuando visitó la Feria de Abril en Sevilla y, junto a todos los actores del acuerdo, proclamó que es tiempo de "sumar" desde proyectos diferentes. Un mensaje que volvió a repetir a las horas de que acabara el plazo para registrar las coaliciones.

De hecho, diversas fuentes de las formaciones implicadas destacan que Díaz, a través de su equipo, ha estado al tanto del proceso la interlocución con las partes. De esta forma, han resaltado que la opción de un candidato y una marca blanca con la suma de sus partidos era la estrategia que le agradaba.

Otros sectores de la confluencia opinan para la candidatura de unidad ha influido el futuro proyecto de Díaz, cuyo espíritu buscan emular, aunque también ha podido dilatar los tiempos del acuerdo para marcar posiciones de cara al futuro.

DIMENSIÓN NACIONAL DEL FRENTE AMPLIO

Por otro lado, el acuerdo cerrado supone la cesión de Podemos de la candidatura de la Presidencia a la Junta en favor de IU, lo que supone un cambio de la tendencia marcada en los comicios autonómicos desde 2023.

En cambio, consigue cuatro cabezas de lista provinciales y una posible mayoría del grupo parlamentario, frente a lo que sucede actualmente al no disponer de diputados tras la ruptura en el grupo parlamentario con el sector de Adelante Andalucía, liderado por Teresa Rodríguez y que no se ha sumado a esta unidad, pese a las llamadas de última hora para ofrecer su inclusión.

El acuerdo llega también tras algunos episodios de distanciamiento entre Podemos y Yolanda Díaz, como el que protagonizó la diferencia de opinión en lo relativo al envío de armas a Ucrania. De esta forma, los morados han reivindicado que han sido generosos y responsables para poder sacar adelante el proyecto.

Mientras, Más País prácticamente se garantiza un puesto en la cámara andaluza al tener el cabeza de lista por Sevilla y así consigue representación más allá de Madrid y del Congreso en la figura de Esperanza Gómez, que es coportavoz de la formación.

De esta forma, el frente amplio andaluz también ha cobrado una dimensión nacional, como primer ensayo del espíritu de ese reconfiguración del espacio de izquierda que abandera Díaz, en un territorio clave para en los futuros comicios generales.

FRUSTRADO INTENTO DE CANDIDATO INDEPENDIENTE

Las negociaciones para la confluencia se enquistaron en lo referente al candidato a presidir la Junta ante la imposiblidad de lograr atraer un candidato independiente que encabezara la lista de unidad, que era una de las demandas de Más País y que también agradaba a la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz.

Para esta candidatura se ha optado por una marca blanca y se intentó la opción de un candidato independiente a los partidos, una condición que expuso Más País y que fue aceptada para poder ensayar el frente amplio

Y es que, como relatan fuentes implicadas en el proceso, aunque se sondearon varias opciones, como el expolítico Javier Aroca; el secretario general de Facua, Ruben Sánchez; la secretaria general de CCOO Andalucía, Nuria López, al final se tuvo que recurrir a la propuestas procedentes de los partidos al no concretarse la opción de una figura 'blanca', ajena a las formaciones.

Ante esta disyuntiva, también se barajó la posibilidad, como 'plan b' de unas primarias conjuntas con un censo con criterios de igualdad entre los partidos, algo que tuvo cierta aceptación al principio y que agradaba a Podemos, pero que finalmente fue descartada por IU y Más País.