Jueves, 28 de noviembre de 2024
Dos socialistas y un popular por error
Ocho eurodiputados españoles votaron por el regreso de la flota pesquera de Marruecos
Un total de ocho eurodiputados españoles, entre ellos dos socialistas y un popular por error, han votado en contra de la prórroga provisional que permitía a la flota comunitaria faenar en aguas gestionadas por Marruecos hasta el próximo febrero de 2012, en línea con la posición de la mayoría del pleno del Parlamento Europeo. La decisión de tumbar la prórroga obligará a los buques en la zona, en su mayoría españoles, a cesar de inmediato la actividad.
El vicepresidente del grupo de Los Verdes en la Eurocámara y representante de ICV, Raül Romeva, y el eurodiputado de Izquierda Unida Willy Meyer han votado en contra de la prórroga, tal y como habían anunciado previamente.
Meyer y Romeva han celebrado en sendos comunicados que el Parlamento Europeo haya rechazado un acuerdo que, a su juicio, vulnera el Derecho internacional por incluir en el régimen pesquero los recursos del Sáhara occidental.
La votación sobre la prórroga del acuerdo pesquero ha sido nominal y, de acuerdo a la lista facilitada por el Parlamento Europeo, también se han pronunciado en contra del convenio con Rabat otros seis eurodiputados españoles: Izaskun Bilbao (PNV), Ramon Tremosa i Balcells (ERC), Francisco Sosa Wagner (UPyD), Pablo Zalba (PP), Dolores García-Hierro (PSOE) y Sergio Gutiérrez Prieto (PSOE).
Fuentes socialistas han aclarado más tarde a Europa Press que el voto negativo de García-Hiero y Gutiérrez Prieto se ha debido a "un error" que ha sido "corregido", de modo que el grupo de socialistas españoles en la Eurocámara se ha pronunciado "en bloque" a favor de prorrogar el acuerdo de pesca.
También el eurodiputado Pablo Zalba se equivocó en este voto y "ya ha pedido la corrección del acta", según han informado fuentes del PP. En total, la ratificación de la prórroga ha recibido 326 votos en contra, 296 a favor y 58 abstenciones.
El resto de eurodiputados españoles que han participado en la votación, celebrada este miércoles en Estrasburgo (Francia), lo han hecho para apoyar la prórroga y ninguno se ha abstenido.
La opinión de la Eurocámara es de carácter vinculante, por lo que este voto supone que los barcos de la Unión Europea tendrán que cesar su actividad de forma inmediata en los caladeros afectados. Pero necesita ser trasladada a un texto legal, lo que deben hacer el jueves los ministros de Pesca de la UE, que se reúnen en Bruselas en su consejo mensual, han explicado fuentes comunitarias.
El acuerdo actual ofrece 36,1 millones de euros anuales a Marruecos a cambio de 119 licencias de pesca, cerca de un centenar de ellas para barcos españoles; andaluces y canarios en su mayoría.
Las dudas de los servicios jurídicos del Parlamento Europeo respecto al respeto de los Derechos Humanos de la población del Sáhara Occidental y otras polémicas por el impacto medioambiental del acuerdo y por su poca rentabilidad económica para la UE habían retrasado hasta ahora la votación de la prórroga. Pese a todo, los buques europeos han seguido faenando en la región en virtud de un acuerdo provisional entre Bruselas y Rabat.
Columnistas
La subida global de temperaturas y la conveniencia de ir sustituyendo las fuentes de energía tradicionales (gas, petróleo y carbón) por otras más sostenibles es un tema de permanente actualidad tanto en los medios de comunicación como en la política. Frente a la versión aplastantemente mayoritaria del problema y sus soluciones, el ciudadano atento y bien informando acaba descubriendo algunos problemas a los que no se les presta demasiada atención. En este artículo se presentarán algunos de ellos
Por Francisco Javier Garcia AlonsoLeer columna
La propuesta que más influyó para atraer el voto de muchos europeos hacia las nuevas derechas es el rechazo a las políticas que facilitan la inmigración incontrolada, pues están convencidos de que aumenta la delincuencia y favorece la islamización de Europa
Por Angel Jiménez LacaveLeer columna
La alternativa a la "justicia social" no es un escenario de pobres muriéndose en las aceras por falta de recursos para pagarse un hospital. La alternativa sería una sociedad en la que, con una presión fiscal que fuese muy inferior a la actual, la gran mayoría de la gente se las arreglase muy bien por sí misma, sin depender de papá Estado. Publicado en el centro Covarrubias
Por Francisco J Contreras Leer columna
Este hombre de 82 años ha hecho más daño al sanchismo en dos meses que Feijóo y sus diputados en esta legislatura
Por Rafael Sánchez SausLeer columna
En su libro “Agenda 2033, nueva y eterna”, Eduardo Granados presenta una propuesta para que pongamos nuestra mirada en 2033, fecha en la que se cumplen dos mil años de la Redención. En 2033 confluyen las celebraciones del bimilenario de la institución de la Eucaristía, de la muerte y resurrección de Cristo y del nacimiento de la Iglesia. En esta entrevista el autor nos da las claves de esta original propuesta.
Por Teodoreto de Samos Leer columna
Detrás de tanta normativa milimétrica se agazapa una desconfianza descomunal en la gestión privada, que actúa como un implícito reproche moral. Publicado en El Debate
Por Enrique García MáiquezLeer columna
Occidente no perdió el rumbo en 1776, sino en 1917 y 1968.
Por Francisco J Contreras Leer columna
Sólo el advenimiento de los Reyes Católicos, y el resultado de su prodigiosa obra, pudo superar, andando el tiempo, esa primacía en la memoria de los castellanos. Pero para ello hubieron de pasar casi doscientos cincuenta años Publicado en El Debate
Por Rafael Sánchez SausLeer columna
Cabe resaltar aquí lo afirmado por el fiscal jefe de la Audiencia Nacional: "En definitiva, da igual el explosivo que se utilizara, lo cierto es que todas las pruebas apuntan a que estos personajes fueron los que cometieron ese atentado y la trama asturiana proporcionó los explosivos" (sic).
Por Ana María Velasco Plaza Leer columna
El papel rector de la Comisión Europea —que concentra todo el poder ejecutivo y gran parte del legislativo de la UE, pero no responde ni ante los Gobiernos nacionales, ni ante los ciudadanos europeos ni ante el Parlamento Europeo— es el principal instrumento de ese proceso de supranacionalización Publicado previamente en LA GACETA
Por Francisco J Contreras Leer columna