Domingo, 05 de mayo de 2024
Planes fallidos, males indeseados
Esta “lógica de lo habitual” es engañosa, pues no permite prever de antemano lo extremadamente improbable. Tú vas a un parque y esperas ver cisnes blancos, pero te quedas sorprendido al ver uno de color negro; regentas una tienda de cosméticos y esperas que aumentando el precio de una crema disminuyan las unidades vendidas, pero te encuentras con que sus ventas aumentan.
Igualmente, disponemos de una lógica histórica que explica -digamos- el 95% de los acontecimientos posibles, lo cual deja sin explicar un 5% que, cuando suceden, son descritos como “inesperados”, “sorprendentes” e “inexplicables” por la lógica previamente existente: la Guerra del Líbano, la Guerra de los Balcanes, el crash de 2008 o las revoluciones árabes.
Nadie los ve venir, se supone que no deberían suceder, que los planes humanos están diseñados para que no acontezcan, y sin embargo están ahí, recordándonos a cada momento nuestra incapacidad para construir la Torre de Babel que nos acerque a la condición de dioses regidores de nuestro destino.
Los masones son uno de los colectivos más incapaces de entender esto, lo que no es de extrañar dada su contumaz idolatría de la “diosa Razón”. Su especialidad es diseñar planes de descristianización, sin reparar en que su lógica histórica es fallida y acaba generando catástrofes inesperadas, como la degeneración social a resultas de reemplazar la ética del bienser por la ética del bienestar; o el previsible predominio demográfico musulmán en Europa a resultas de su cultura de la muerte, etc.
Columnistas
En su libro “Agenda 2033, nueva y eterna”, Eduardo Granados presenta una propuesta para que pongamos nuestra mirada en 2033, fecha en la que se cumplen dos mil años de la Redención. En 2033 confluyen las celebraciones del bimilenario de la institución de la Eucaristía, de la muerte y resurrección de Cristo y del nacimiento de la Iglesia. En esta entrevista el autor nos da las claves de esta original propuesta.
Por Teodoreto de Samos Leer columna
Detrás de tanta normativa milimétrica se agazapa una desconfianza descomunal en la gestión privada, que actúa como un implícito reproche moral. Publicado en El Debate
Por Enrique García MáiquezLeer columna
Occidente no perdió el rumbo en 1776, sino en 1917 y 1968.
Por Francisco J Contreras Leer columna
Sólo el advenimiento de los Reyes Católicos, y el resultado de su prodigiosa obra, pudo superar, andando el tiempo, esa primacía en la memoria de los castellanos. Pero para ello hubieron de pasar casi doscientos cincuenta años Publicado en El Debate
Por Rafael Sánchez SausLeer columna
Cabe resaltar aquí lo afirmado por el fiscal jefe de la Audiencia Nacional: "En definitiva, da igual el explosivo que se utilizara, lo cierto es que todas las pruebas apuntan a que estos personajes fueron los que cometieron ese atentado y la trama asturiana proporcionó los explosivos" (sic).
Por Ana María Velasco Plaza Leer columna
El papel rector de la Comisión Europea —que concentra todo el poder ejecutivo y gran parte del legislativo de la UE, pero no responde ni ante los Gobiernos nacionales, ni ante los ciudadanos europeos ni ante el Parlamento Europeo— es el principal instrumento de ese proceso de supranacionalización Publicado previamente en LA GACETA
Por Francisco J Contreras Leer columna
No sé si las palabras del juez ponente del proceso del 11M -"hay cosas tan graves en el 11-M que por ahora es mejor que no se sepan"- están ahora más en vigor que nunca antes.
Por Ana María Velasco Plaza Leer columna
Un año más enviamos nuestra felicitación navideña a nuestros lectores
Por Editorial Leer columna
A propósito de este acuerdo vienen a la memori las palabras de San Agustín en La ciudad de Dios, si no se respeta la justicia, ¿Qué son los Estados sino grandes bandas de ladrones?.
Por José Luis LafuenteLeer columna
Las naciones no son entes abstractos sino productos de la historia y, como tales, objeto de construcción o destrucción
Por Rafael Sánchez SausLeer columna
La actitud del Partido Socialista chileno hacia la democracia era en los 60 y 70 la misma que la del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) de Francisco Largo Caballero desde 1933: la democracia podía interesar como instrumento o puente hacia la dictadura del proletariado.
Por Francisco J Contreras Leer columna