Sabado, 23 de noviembre de 2024

Juego de trolas

La aparente pasividad de Rajoy ha sido, y es, la contribución necesaria para que, de forma activa pero encubierta, se llegue a una situación crítica e irreversible que justifique el apaño como solución de alivio. Es el "magistral control de los tiempos" que propicie un cambio de régimen consensuado a espaldas de la mayoría de los españoles.

Sin incurrir en demasiada ficción, todos los hechos parecen apuntar a que Rajoy estaría cumpliendo un extraño e inconfesable trato  por el que llegaría a la Presidencia del Gobierno siempre que indujera, tras una situación límite concertada con los independentistas, un cambio confederal de la Constitución: El cambio de Régimen y "el tiempo nuevo"(sic), anunciado por algunos voceros inmediatamente después de la masacre del 11-M , ignominioso punto de arranque del caos que estamos sufriendo.

Para ello, y previamente, Rajoy tenía que aniquilar a su propio partido, expulsar a liberales, conservadores y a quienes ideológicamente se opusieran al nuevo guión. Luego, adoptando todas las reformas y leyes de Zapatero, tenía que desactivar a las victimas del terrorismo y pactar de forma encubierta con ETA el cese temporal de la violencia a cambio de que pudieran gobernar en el País Vasco, pasando temporalmente el protagonismo a los independentistas catalanes para culminar el llamado "proceso". Todo ello maquillado y vendido como la derrota y fin de ETA, de una ETA que ha vuelto a pronunciarse como tal en Cataluña.  Los Medios de Comunicación, eran otro frente imprescindible que había que controlar para realizar con éxito la misión, y para ello la labor de la Vicepresidenta ha sido encomiable. Estos medios han sido los encargados de lanzar al estrellato a un partido leninista con el triple cometido de debilitar las instituciones, calentar la calle y asustar a los incautos.

Una vez cumplidos estos objetivos tácticos, surgiría una activación progresiva del independentismo catalán con financiación estatal, la pasividad ante graves violaciones de la Constitución, ante burlas al Estado y agresiones a la unidad y dignidad de la Nación, sumándose a la dejación ante el incumplimiento flagrante e insultante del Código Penal y de las sentencias judiciales. Por dos veces consentiría, por inacción dolosa, un referéndum ilegal después de afirmar, primero, que no lo habría para, a continuación, negar que lo hubiera habido. Remataría la faena poniendo en ridículo a España ante todo el mundo con la actuación impotente y el posterior abandono y vejación de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad, defensores del orden constitucional, ante un claro golpe de Estado, junto a la negativa de la aplicación de aquellos artículos del Código Penal y de la Carta Magna previstos para estos casos.

A pesar de toda esta deserción de responsabilidades, el desgobierno de la nación ha continuado con el escandaloso engaño a los españoles con frases equívocas como "la situación esta absolutamente controlada" o como estar dispuesto a "no cerrar ninguna puerta al dialogo y poder encontrar acuerdos dentro o fuera del Parlamento" (¿se refería, quizás, a otro objetivo programado y adelantaba sus auténticas intenciones?).

El magnífico y contundente discurso del Rey,  y el escrito no menos rotundo de FAES, han hecho que Rajoy hiciera unas aún más preocupantes declaraciones a la agencia EFE. Como siempre ha hecho,  tolera todas las críticas y amenazas que vengan de la izquierda extrema y de los nacionalistas pero, le ha faltado tiempo para, embravecido y prepotente, arremeter contra las advertencias hechas por la experiencia de hombres de estado. Y hacerlo desde el despotismo: "haré lo que crea y en el momento que me parezca mas oportuno" "dice- al tiempo que se humilla al suplicar a Puigdemont que "no declare la independencia", añadiendo que "no vamos a llegar tarde a ninguna parte, porque no se va a producir la independencia", y que "espero que acertemos", como si de una quiniela se tratara.

Permítanme reiterar lo dicho en mi último escrito en esta sección (LNE 14-9-2017): <<Después del uno de Octubre, cuando la confrontación haya llegado al momento álgido y por el bien de la nación, el Gobierno y todos los grupos parlamentarios nos ofrecerán, a hechos consumados, la reforma confederal como la mejor solución para contentar, de momento, a los nacionalistas, sabedores de haber conseguido el paso previo necesario para la independencia. ¡Como me gustaría equivocarme!>>

Por desgracia creo que no me estoy equivocando y que  "la profecía" se va cumpliendo


Comentarios

No hay comentarios sobre esta noticia.

Comentar

Columnistas

Algunos problemas en el horizonte de la política verde actual

La subida global de temperaturas y la conveniencia de ir sustituyendo las fuentes de energía tradicionales (gas, petróleo y carbón) por otras más sostenibles es un tema de permanente actualidad tanto en los medios de comunicación como en la política. Frente a la versión aplastantemente mayoritaria del problema y sus soluciones, el ciudadano atento y bien informando acaba descubriendo algunos problemas a los que no se les presta demasiada atención. En este artículo se presentarán algunos de ellos

Por Francisco Javier Garcia AlonsoLeer columna

El tráfico con inmigrantes y el avance de las nuevas derechas europeas

La propuesta que más influyó para atraer el voto de muchos europeos hacia las nuevas derechas es el rechazo a las políticas que facilitan la inmigración incontrolada, pues están convencidos de que aumenta la delincuencia y favorece la islamización de Europa

Por Angel Jiménez LacaveLeer columna

La trampa de la Justicia social

La alternativa a la "justicia social" no es un escenario de pobres muriéndose en las aceras por falta de recursos para pagarse un hospital. La alternativa sería una sociedad en la que, con una presión fiscal que fuese muy inferior a la actual, la gran mayoría de la gente se las arreglase muy bien por sí misma, sin depender de papá Estado. Publicado en el centro Covarrubias

Por Francisco J Contreras Leer columna

Miguel Bernad en la revuelta

Este hombre de 82 años ha hecho más daño al sanchismo en dos meses que Feijóo y sus diputados en esta legislatura

Por Rafael Sánchez SausLeer columna

"Agenda 2033, nueva y eterna"

  En su libro “Agenda 2033, nueva y eterna”, Eduardo Granados presenta una propuesta para que pongamos nuestra mirada en 2033, fecha en la que se cumplen dos mil años de la Redención. En 2033 confluyen las celebraciones del bimilenario de la institución de la Eucaristía, de la muerte y resurrección de Cristo y del nacimiento de la Iglesia. En esta entrevista el autor nos da las claves de esta original propuesta.  

Por Teodoreto de Samos Leer columna

Ningun margen

Detrás de tanta normativa milimétrica se agazapa una desconfianza descomunal en la gestión privada, que actúa como un implícito reproche moral. Publicado en El Debate

Por Enrique García MáiquezLeer columna

¿Son los derechos humanos una idea tóxica?

Occidente no perdió el rumbo en 1776, sino en 1917 y 1968.

Por Francisco J Contreras Leer columna

San Fernando: el rey y el gobernante

Sólo el advenimiento de los Reyes Católicos, y el resultado de su prodigiosa obra, pudo superar, andando el tiempo, esa primacía en la memoria de los castellanos. Pero para ello hubieron de pasar casi doscientos cincuenta años Publicado en El Debate

Por Rafael Sánchez SausLeer columna

Goma 2 Eco asturiana ¡y ya vale!

Cabe resaltar aquí lo afirmado por el fiscal jefe de la Audiencia Nacional: "En definitiva, da igual el explosivo que se utilizara, lo cierto es que todas las pruebas apuntan a que estos personajes fueron los que cometieron ese atentado y la trama asturiana proporcionó los explosivos" (sic).

Por Ana María Velasco Plaza Leer columna

¿Por qué no una Europa gaullista?

El papel rector de la Comisión Europea —que concentra todo el poder ejecutivo y gran parte del legislativo de la UE, pero no responde ni ante los Gobiernos nacionales, ni ante los ciudadanos europeos ni ante el Parlamento Europeo— es el principal instrumento de ese proceso de supranacionalización   Publicado previamente en LA GACETA

Por Francisco J Contreras Leer columna

Encuesta
¿Logrará la ciudadanía frenar la ley de amnistía?

a) no, el gobierno lo tiene todo "bien atado"
b) sí, la fuerza del pueblo es imparable

Dignidad Digital, S.L. E-mail: redaccion@dignidaddigital.com
logo