Lunes, 09 de diciembre de 2024
Historias dinásticas
Un país de fábula
Me cuenta un viejo y sabio amigo una fábula antigua que me suena como propia
Había un país en Europa con gran afición a echar reyes. Desde muy antiguo los reyes trincaban el dinero de sus súbditos. Hubo un padre y un hijo, ambos reyes, que traicionaron a su pueblo, y ambos se traicionaron entre si, vendiendo la nación a un general extranjero,
El curioso pueblo de la fabula echo al general, trajo al golfo hijo del rey golfo, que, nadie lo pensaría, murió siendo rey. Había comprado PERSONALMENTE una flota completa al Zar, 5 navíos de alta bordo y 3 fragatas. Los buques, pagados religiosamente como nuevos, eran viejos, tardaron en llegar 122 días, del Báltico al Mediterráneo, después de dos meses de reparaciones importantes en Inglaterra.
Aquellas cosas semiflotantes tenían cascos podridos. Todos los barcos fueron desguazados antes de los nueve años. Uno no llegó a navegar y otro naufragó a los cuatro años, en el primer viaje largo que hizo. Dada su inutilidad ninguno entró en combate.
Le sucedió una hija, más golfa aun que todos sus antepasadas, lo que ya es mérito, pues se lo habían puesto muy difícil, esta dama vendió las joyas del Tesoro Nacional quedándose con el 25% de su importe.
En el mientras tanto se benefició a todo varón que se puso a tiro, logró que la echasen. Un golpe militar, trajo a su hijo. Un chaval guapo y que valía, tenía la gran ventaja que casi no era de la familia real, su padre era un guapo capitán que pasaba por allí. En nuevo rey funcionó relativamente bien pero murió pronto.
Su hijo no fue el peor, la nación subió económicamente, perdimos los restos de nuestro Imperio, se consiguieron algunas libertades, pero desapareció la seguridad ciudadana. Fue un putero sin demasiada moral, a una de sus bastardas la internó en un hospicio.
Hubo unas elecciones que ganó, no obstante el cobarde rey salió huyendo dejando a su mujer e hijos haciendo las maletas.
Decía un político conocido de la nación refiriéndose a él: “A poco que esto prosiga, se dará el caso de que así como antes solo hablaban mal del rey los que le conocían, pronto hablará mal todo el mundo.
Le sucedió otro rey, decían que llegaba flojo de fondos, pasados los años dicen que anda muy bien, me refiero de fondos solamente. No se le conocen más negocios que el de ser rey, dicen que tiene y tuvo amigas caras.
De moral no es un ejemplo, con el país fabulado arruinado, se iba a cazar caros elefantes. Lo cual no es demasiado malo. Pero sí la tomadura de pelo a sus súbditos, ya que cuando subía la escalerilla de avión, les recomendaba encarecidamente a los estupidos que se quedaban, que debían ser parcos en el gasto y sacrificarnos como él daba ejemplo.
Bueno pues una hija, con carrera universitaria, varios prestigiosos master, largamente trabajando en un banco muy importante, se le casa con un golfo, presunto, sin oficio ni beneficio. Curiosamente llevan una fastuosa vida.
Con esos antecedentes familiares, ¿a alguien le puede parecer raro que esta hija, esté en la pomada de su presunto golfo marido?
Y como poco sea igual de presunta golfa, que el presunto golfo, ¡O más!
Pues solo, el faltoso y guapo cónyuge, no hubiese robado un euro y acompañado de su despistada mujer, fehacientemente ha demostrado que se puede afanar lo suficiente para gastos menudos.
Francisco Alamán Castro
Columnistas
La subida global de temperaturas y la conveniencia de ir sustituyendo las fuentes de energía tradicionales (gas, petróleo y carbón) por otras más sostenibles es un tema de permanente actualidad tanto en los medios de comunicación como en la política. Frente a la versión aplastantemente mayoritaria del problema y sus soluciones, el ciudadano atento y bien informando acaba descubriendo algunos problemas a los que no se les presta demasiada atención. En este artículo se presentarán algunos de ellos
Por Francisco Javier Garcia AlonsoLeer columna
La propuesta que más influyó para atraer el voto de muchos europeos hacia las nuevas derechas es el rechazo a las políticas que facilitan la inmigración incontrolada, pues están convencidos de que aumenta la delincuencia y favorece la islamización de Europa
Por Angel Jiménez LacaveLeer columna
La alternativa a la "justicia social" no es un escenario de pobres muriéndose en las aceras por falta de recursos para pagarse un hospital. La alternativa sería una sociedad en la que, con una presión fiscal que fuese muy inferior a la actual, la gran mayoría de la gente se las arreglase muy bien por sí misma, sin depender de papá Estado. Publicado en el centro Covarrubias
Por Francisco J Contreras Leer columna
Este hombre de 82 años ha hecho más daño al sanchismo en dos meses que Feijóo y sus diputados en esta legislatura
Por Rafael Sánchez SausLeer columna
En su libro “Agenda 2033, nueva y eterna”, Eduardo Granados presenta una propuesta para que pongamos nuestra mirada en 2033, fecha en la que se cumplen dos mil años de la Redención. En 2033 confluyen las celebraciones del bimilenario de la institución de la Eucaristía, de la muerte y resurrección de Cristo y del nacimiento de la Iglesia. En esta entrevista el autor nos da las claves de esta original propuesta.
Por Teodoreto de Samos Leer columna
Detrás de tanta normativa milimétrica se agazapa una desconfianza descomunal en la gestión privada, que actúa como un implícito reproche moral. Publicado en El Debate
Por Enrique García MáiquezLeer columna
Occidente no perdió el rumbo en 1776, sino en 1917 y 1968.
Por Francisco J Contreras Leer columna
Sólo el advenimiento de los Reyes Católicos, y el resultado de su prodigiosa obra, pudo superar, andando el tiempo, esa primacía en la memoria de los castellanos. Pero para ello hubieron de pasar casi doscientos cincuenta años Publicado en El Debate
Por Rafael Sánchez SausLeer columna
Cabe resaltar aquí lo afirmado por el fiscal jefe de la Audiencia Nacional: "En definitiva, da igual el explosivo que se utilizara, lo cierto es que todas las pruebas apuntan a que estos personajes fueron los que cometieron ese atentado y la trama asturiana proporcionó los explosivos" (sic).
Por Ana María Velasco Plaza Leer columna
El papel rector de la Comisión Europea —que concentra todo el poder ejecutivo y gran parte del legislativo de la UE, pero no responde ni ante los Gobiernos nacionales, ni ante los ciudadanos europeos ni ante el Parlamento Europeo— es el principal instrumento de ese proceso de supranacionalización Publicado previamente en LA GACETA
Por Francisco J Contreras Leer columna