Viernes, 26 de abril de 2024
Algunas preguntas y respuestas entorno al Catecismo
El pecado original (2)
El pecado original tiene como consecuencias la introducción del dolor y de la muerte en el mundo y la pérdida del estado inicial de amistad con Dios, es decir del paraíso. Pero tan grave como eso es el hecho de que ese primer pecado fue transmitido a toda la descendencia de los que lo cometieron, la cual nace con él. De ahí viene precisamente el nombre: “pecado original”. Lo tenemos desde nuestro origen, desde el momento de la concepción. Del mismo modo que heredamos la naturaleza humana, con todas sus consecuencias, heredamos también la falta cometida por nuestros primeros padres
El Catecismo afirma con total claridad la existencia del pecado original, sin dejar lugar a dudas, desautorizando así a los que, incluso dentro de la Iglesia, niegan o minimizan este dogma de fe. “Todos los hombres están implicados en el pecado de Adán” (nº 402). “Siguiendo a San Pablo, la Iglesia ha enseñado siempre que la inmensa miseria que oprime a los hombres y su inclinación al mal y a la muerte no son comprensibles sin su conexión con el pecado de Adán y con el hecho de que nos ha transmitido un pecado con que todos nacemos afectados y que es muerte del alma” (403). “¿Cómo el pecado de Adán vino a ser el pecado de todos sus descendientes? Todo el género humano es en Adán ‘como el cuerpo único de un único hombre’ (Santo Tomás de Aquino). Por esta unidad del género humano, todos los hombres están implicados en la justicia de Cristo. Sin embargo, la transmisión del pecado original es un misterio que no podemos comprender plenamente. Pero sabemos por la Revelación que Adán había recibido la santidad y la justicia originales no para él solo sino para toda la naturaleza humana: cediendo al tentador, Adán y Eva cometen un pecado personal, pero este pecado afecta a la naturaleza humana, que transmitirán en un estado caído. Es un pecado que será transmitido por propagación a toda la humanidad, es decir por la transmisión de una naturaleza humana privada de la santidad y de la justicia originales. Por eso, el pecado original es llamado ‘pecado’ de manera análoga: es un pecado ‘contraído’, ‘no cometido’, un estado y no un acto” (nº 404)”.
El tema del pecado original es tan serio que, en el siglo XVI, los protestantes concluyeron que debido a este pecado el hombre estaba tan pervertido en sus raíces y tan anulada su libertad que le sería imposible dejar de hacer el mal. La Iglesia intervino en el debate rechazando esta imagen pesimista del hombre. Se terminó de elaborar así una doctrina que tenía sus orígenes en el siglo V, en la lucha contra la herejía de Pelagio llevada a cabo por San Agustín. “La naturaleza humana no está totalmente corrompida -dice el Catecismo en un texto lleno de equilibrio-: está herida en sus propias fuerzas naturales, sometida a la ignorancia, al sufrimiento y al imperio de la muerte e inclinada al pecado (esta inclinación al mal es llamada concupiscencia)” (nº 405). Y más adelante extrae otra consecuencia: “Por el pecado de los primeros padres, el diablo adquirió un cierto dominio sobre el hombre, aunque éste permanezca libre. Ignorar que el hombre posee una naturaleza herida, inclinada al mal, da lugar a graves errores en el dominio de la educación, de la política, de la acción social y de las costumbres” (nº 407)”.
Preguntas y respuestas seleccionadas por el P. Santiago Martín
Para saber más sobre Franciscanos de María pinchar en http://www.frmaria.org/
http://www.magnificat.tv/, donde ya se pueden escuchar y ver las conferencias cuaresmales del P. Santiago sobre la fe
http://www.catolicos-on-line.org/
Columnistas
Detrás de tanta normativa milimétrica se agazapa una desconfianza descomunal en la gestión privada, que actúa como un implícito reproche moral. Publicado en El Debate
Por Enrique García MáiquezLeer columna
Occidente no perdió el rumbo en 1776, sino en 1917 y 1968.
Por Francisco J Contreras Leer columna
Sólo el advenimiento de los Reyes Católicos, y el resultado de su prodigiosa obra, pudo superar, andando el tiempo, esa primacía en la memoria de los castellanos. Pero para ello hubieron de pasar casi doscientos cincuenta años Publicado en El Debate
Por Rafael Sánchez SausLeer columna
Cabe resaltar aquí lo afirmado por el fiscal jefe de la Audiencia Nacional: "En definitiva, da igual el explosivo que se utilizara, lo cierto es que todas las pruebas apuntan a que estos personajes fueron los que cometieron ese atentado y la trama asturiana proporcionó los explosivos" (sic).
Por Ana María Velasco Plaza Leer columna
El papel rector de la Comisión Europea —que concentra todo el poder ejecutivo y gran parte del legislativo de la UE, pero no responde ni ante los Gobiernos nacionales, ni ante los ciudadanos europeos ni ante el Parlamento Europeo— es el principal instrumento de ese proceso de supranacionalización Publicado previamente en LA GACETA
Por Francisco J Contreras Leer columna
No sé si las palabras del juez ponente del proceso del 11M -"hay cosas tan graves en el 11-M que por ahora es mejor que no se sepan"- están ahora más en vigor que nunca antes.
Por Ana María Velasco Plaza Leer columna
Un año más enviamos nuestra felicitación navideña a nuestros lectores
Por Editorial Leer columna
A propósito de este acuerdo vienen a la memori las palabras de San Agustín en La ciudad de Dios, si no se respeta la justicia, ¿Qué son los Estados sino grandes bandas de ladrones?.
Por José Luis LafuenteLeer columna
Las naciones no son entes abstractos sino productos de la historia y, como tales, objeto de construcción o destrucción
Por Rafael Sánchez SausLeer columna
La actitud del Partido Socialista chileno hacia la democracia era en los 60 y 70 la misma que la del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) de Francisco Largo Caballero desde 1933: la democracia podía interesar como instrumento o puente hacia la dictadura del proletariado.
Por Francisco J Contreras Leer columna
En Asturias, la Sala de lo contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia en sentencia 620/2023, de 29 de mayo, dictada en el recurso PO 791/2022, ha estimado el recurso formulado por el Arzobispado de Oviedo impugnando el Decreto 60/2022, de 30 de agosto.
Por José Luis LafuenteLeer columna