Mas ha anunciado la convocatoria poco después de que la presidenta del parlamento, Nuria Gispert, haya explicado que el líder del Ejecutivo catalán recibirá esta semana a la Asamblea Nacional Catalana, la promotora de la marcha.

  La Delegación del Gobierno central en Cataluña ha cifrado en 600.000 personas los asistentes. Así lo ha informado en un comunicado según "estimaciones coincidentes" de la Policía Nacional y la Guardia Civil, mientras que la Guardia Urbana de Barcelona y el Ayuntamiento ha fijado la participación en un millón y medio de personas.

   A lo largo del recorrido se han podido ver pancartas contra el líder de Unión, José Antonio Duran, reclamos al presidente de la Generalidad, Arturo Mas, para que "plante a España", augurios como El próximo recorte será la independencia y muchos manifestantes que hablan en castellano. 

  De hecho, a la marcha ha acudido una amplia representación de políticos y de la sociedad civil catalana, entre ellos, el expresidente Jorge Pujol; los expresidentes del Parlament, Juan Rigol y Ernesto Benach. Además de una delegación de CiU entre la que figuraban la vicepresidenta Juana Ortega; Arturo Mas no ha estado en la marcha, que apoya "anímicamente" pero que considera que su cargo institucional no le permite ir, aunque sí que ha participado en ella y en primera fila de la delegación nacionalista su esposa, Helena Rakosnik. 

  También, varios consejeros de la Generalidad, y el presidente de la Diputación de Lérida, Juan Reñé, entre otros. 

  Ortega ha asegurado al inicio de la marcha que "nadie hace callar" al pueblo catalán, y se ha mostrado impresionada por la masiva participación ciudadana. 

  Asimismo, ha ensalzado el ambiente festivo y de reivindicación pacífica de la marcha que muestra el clamor de un pueblo por un nuevo sistema de financiación, y ha considerado que a partir de este martes "el mundo entero leerá lo que dice Cataluña en sus calles", ha dicho en declaraciones a Cataluña Radio. 

  También han asistido representantes de ICV y ERC, además de miembros del ala catalanista del PSC, como Ernesto Maragall, Montserrat Tura, Marina Geli y el alcalde de Lérida Ángel Ros.  

Por su parte, el exlíder de ERC y exmiembro del gobierno tripartito, José Luís Carod Rovira, ha destacado que la manifestación de esta Diada Nacional es la primera manifestación de la historia que no va en contra de una decisión de Madrid ni se trata de una reacción negativa. 

  "Es una propuesta con un objetivo", ha dicho en declaraciones a Europa Press, tras dejar claro que Cataluña no lo dice solo a Madrid, sino que también el mensaje es para ella misma y el mundo.   También, representantes del sector de la cultura que han participado en la manifestación independentista de esta Diada la han calificado como una cita "extraordinaria" y un punto de inflexión en la historia de Cataluña.

RECORRIDO ALTERNATIVO 

  Por su parte, quince miembros de la ANC y de la AMI han tomado un recorrido alternativo para llegar a la Estación de Francia, leer un manifiesto y posteriormente reunirse con la presidenta del Parlamento, Nuria Gispert, según ha informado la consejeria de Interior. 

  Gispert ha felicitado a los organizadores de la manifestación "inequívocamente soberanista". Además, ha asegurado que la clase política escuchará al clamor que ha expresado la ciudadanía que ha participado en la manifestación, en la que "el pueblo de Cataluña ha salido para defender sus derechos y libertades". 

  Además, la Guardia Urbana ha cortado el tráfico de las principales arterias del centro de la capital catalana por donde ha discurrido la manifestación. 

El paseo de Gracia ha estado cortado, así como las calles transversales que dan a esta calle principal, mientras que ha habido desvíos en Plaza Urquinaona, Pau Claris y Laietana.