Viernes, 15 de enero de 2021
Columnistas
Se hicieron públicos hace unas semanas los datos demográficos definitivos de 2019: más terroríficos que nunca, tan desatendidos como siempre. Ofrecen la imagen de un país en rápido despeñamiento hacia el suicidio poblacional. Publicado en La Gaceta de la Iberosfera
Por Francisco J Contreras Leer columna
A la sombra de la pandemia se van recortando los logros conseguidos en ochenta años.
Por Francisco Alonso-Graña del Valle Leer columna
Los Magos buscaban la Verdad y para encontrarla se embarcan en un largo e incierto viaje Publicado en el Diario de Sevilla
Por Rafael Sánchez SausLeer columna
Esta nación todavía llamada España, nombre que, dadas los últimos acontecimientos y el modo de pensar de los dichos regidores, nos tememos que pueda desaparecer por sus, sin duda, connotaciones franquistas
Por Francisco Alonso-Graña del Valle Leer columna
Siguiendo una tradición de nuestro periódico también este año les felicitamos la Navidad a pesar de que quizá sea la más negra para la inmensa mayoría de nosotros.
Por Editorial Leer columna
Vengo observando el espectáculo marxiano (de los hermanos Marx, entendámonos) que a nuestros ojos desempeñan y ofrecen los titulares de la compañía vodevilesca que conforman dos de los tres elencos que responden a las denominaciones de Moncloa y Congreso&Etc…el tercero ya actúa en otros estadios de seriedad y dramatismo más consistentes.
Por Juan J. RubioLeer columna
¿Por qué se prefiere avanzar en la eutanasia en vez de, como claman los médicos, promover los cuidados paliativos?Publicado en Diario de Sevilla
Por Rafael Sánchez SausLeer columna
Reconozco que acabo de poner un título que puede resultar al menos un tanto intrigante y perdón por ello pero no me apetece cambiarlo y ahora veo lo más difícil: salir adelante y que no sea por peteneras.
Por Francisco Alonso-Graña del Valle Leer columna
Nuestro juglar continúa con su repaso de los grandes hombres que hicieron España
Por Juglar GasparLeer columna
El riesgo cero no existe en nada que merezca la pena intentar, empezando por el mero hecho de vivir Publicado en el Diario de Sevilla
Por Rafael Sánchez SausLeer columna
Shellenberger representa el ecologismo racional, en franca minoría frente al pseudorreligioso en el que la naturaleza ocupa el lugar de Dios. No es sólo que la apuesta por las energías renovables haya resultado antieconómica. Es que se ha convertido en una pseudorreligión milenarista. Publicado en Actuall
Por Francisco J Contreras Leer columna
La primera de muchas, ha sido su infame ley de tasas judiciales, absolutamente inconstitucional y cuyos únicos objetivos son: 1) impedir el acceso de los ciudadanos a la tutela judicial efectiva; 2) eliminar a los pequeños y medianos despachos de abogados y procuradores, que podrían molestar mucho al gobierno de turno y/o amigos a la hora de defender los intereses de los ciudadanos; y, 3) recaudar a costa de destrozar la vida a miles de ciudadanos. Primer paquete explosivo para dinamitar nuestro Estado de Derecho, ganado con la sangre y el sacrificio de muchos españoles.
El Estado tiene que garantizar el acceso de los ciudadanos a la Justicia, y más un Estado que se dice democrático. El Estado no puede al ciudadano, necesitado de pedir justicia, imponerle una gravosa carga fiscal, que convierta el acceso a los tribunales, en un derecho de papel, un derecho que no podrá ser efectivo para la mayoría de los ciudadanos españoles. La reforma que pretende el Sr. Gallardón, en una España en la que la clase política ha dejado a los españoles sin recursos, significa ni más ni menos que la justicia sólo sea accesible para esos tiburones financieros para ejecutar el desahucio de los derechos de todos los españoles.
La sociedad civil debe detectar y reaccionar frente a cualquier atentado contra el Estado de Derecho. El derecho de información, es principio jurídico que garantiza el conocimiento de los hechos necesarios para realizar cualquier acto jurídico. En esta Asturias de los negocios anómalos, del derecho dúctil, suave y moldeable para la administración y sus múltiples ramificaciones, se convierte en derecho de hierro para los ciudadanos.
¿Qué pasa con Asturias y qué les pasa a los asturianos?
No cabe duda de que el miedo de los siervos hace fuerte a sus amos y señores, débiles todos ellos cuando das el puñetazo en la mesa.