Viernes, 19 de abril de 2024
Columnistas
Occidente no perdió el rumbo en 1776, sino en 1917 y 1968.
Por Francisco J Contreras Leer columna
Sólo el advenimiento de los Reyes Católicos, y el resultado de su prodigiosa obra, pudo superar, andando el tiempo, esa primacía en la memoria de los castellanos. Pero para ello hubieron de pasar casi doscientos cincuenta años Publicado en El Debate
Por Rafael Sánchez SausLeer columna
Cabe resaltar aquí lo afirmado por el fiscal jefe de la Audiencia Nacional: "En definitiva, da igual el explosivo que se utilizara, lo cierto es que todas las pruebas apuntan a que estos personajes fueron los que cometieron ese atentado y la trama asturiana proporcionó los explosivos" (sic).
Por Ana María Velasco Plaza Leer columna
El papel rector de la Comisión Europea —que concentra todo el poder ejecutivo y gran parte del legislativo de la UE, pero no responde ni ante los Gobiernos nacionales, ni ante los ciudadanos europeos ni ante el Parlamento Europeo— es el principal instrumento de ese proceso de supranacionalización Publicado previamente en LA GACETA
Por Francisco J Contreras Leer columna
No sé si las palabras del juez ponente del proceso del 11M -"hay cosas tan graves en el 11-M que por ahora es mejor que no se sepan"- están ahora más en vigor que nunca antes.
Por Ana María Velasco Plaza Leer columna
Un año más enviamos nuestra felicitación navideña a nuestros lectores
Por Editorial Leer columna
A propósito de este acuerdo vienen a la memori las palabras de San Agustín en La ciudad de Dios, si no se respeta la justicia, ¿Qué son los Estados sino grandes bandas de ladrones?.
Por José Luis LafuenteLeer columna
Las naciones no son entes abstractos sino productos de la historia y, como tales, objeto de construcción o destrucción
Por Rafael Sánchez SausLeer columna
La actitud del Partido Socialista chileno hacia la democracia era en los 60 y 70 la misma que la del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) de Francisco Largo Caballero desde 1933: la democracia podía interesar como instrumento o puente hacia la dictadura del proletariado.
Por Francisco J Contreras Leer columna
En Asturias, la Sala de lo contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia en sentencia 620/2023, de 29 de mayo, dictada en el recurso PO 791/2022, ha estimado el recurso formulado por el Arzobispado de Oviedo impugnando el Decreto 60/2022, de 30 de agosto.
Por José Luis LafuenteLeer columna
La edad media no fue tan oscura como nos han contado, y menos aún para la ciencia
Por Francisco Javier Garcia AlonsoLeer columna
En el llanto se hizo fuerte la sonrisa
La escena que este domingo nos relata el Evangelio nos abre a una realidad tan dura como cotidiana: la muerte. La última palabra la tiene sin embargo la vida, don inmerecido de Dios
¿Actúa el Espíritu Santo por su cuenta?. ¿Con qué otros nombres se conoce al Espíritu Santo? ¿Con qué símbolos se relaciona al Espíritu Santo?.
De hambres y de hombres. El Pan de Dios
Jamás los verdaderos cristianos y nunca los auténticos discípulos que han saciado las hambres de su corazón en el Pan de Jesús, se han desentendido de las otras hambres de sus hermanos los hombres.
¿Puede haber varios dioses?. ¿Qué es el misterio de la Santísima Trinidad?. ¿Es coherente con Dios la existencia de misterios en lo que a Él respecta?.
La Trinidad es esa casa de Dios que los hombres -sin Él- no logran construir.
¿Qué es lo primero que hay que afirmar del Espíritu Santo?. ¿Qué es lo que nos atrae del Espíritu Santo?. ¿Dónde podemos conocer al Espíritu Santo?.
El Espíritu prometido por Jesús, nos hace continuadores de aquella maravilla, cuando hombres asustados y fugitivos pocos días antes, comienzan a anunciar el paso de Dios por sus vidas en cada una de las lenguas de los que les escuchaban
Los adoradores nocturnos de Oviedo estamos de enhorabuena por la visita que nos hizo el padre trapense Alberico Feliz, que fue vicepostulador de la causa de canonización de San Rafael Arnáiz Barón
Como el Padre envió a Jesús, ahora Él envía a los suyos. Ahora tendrán que contar a todos, lo que han visto y oído, lo que palparon sus manos, su convivencia con el Hijo de Dios.
Amar a Dios es guardar así su Palabra, como hizo María, dejando que haga y diga en nosotros, incluso más allá de lo que nuestro corazón es capaz de comprender.